El Comité Paralímpico Internacional (CPI) desestimó hoy las quejas del atleta surafricano Oscar Pistorius por la medida de las prótesis de su rival, el brasileño Alan Oliveira, que lo batió en la final de los 200 metros (clase T43).

El surafricano, que hace unas semanas compitió también en los Juegos Olímpicos, aseguró nada más terminar la carrera que las prótesis utilizadas por Oliveira eran más largas de lo permitido, hecho que según él provocó una mejora en su rendimiento.

Sin embargo, en una rueda de prensa celebrada hoy en el centro de medios del parque Olímpico, el director de comunicaciones del CPI, Craig Spence, desestimó las quejas del atleta surafricano y señaló que la medida de las prótesis del joven campeón paralímpico brasileño cumplían con la legalidad.

"Tenemos unas normas sobre la longitud de las cuchillas en estas categorías y desde 2010 las medimos antes de cada carrera. Ayer por la noche también lo hicimos y las ocho prótesis entraban dentro de los parámetros reglamentarios", aseguró Spence.

A pesar de la polémica generada y la reacción de Pistorius al terminar la carrera, quejándose airadamente ante los jueces de la competición en la pista de atletismo, el CPI prefiere aparcar el asunto y no se plantea una sanción al corredor surafricano, que ayer perdió la primera prueba de 200 metros en 9 años.

"Es un deportista orgulloso y un magnífico embajador del movimiento paralímpico. Ha hecho más por estos Juegos que cualquier otro atleta en los últimos años. Por eso, queremos escuchar su opinión pero más adelante. Discutir esto debajo del pebetero olímpico al terminar la carrera no era lo adecuado", dijo Spence.

Pistorius, conocido con el apodo de "Blade Runner", perdió ayer la final de 200 metros (clase T43) ante el brasileño Oliveira que, con solo 20 años y un tiempo de 21.45 segundos, fue 7 centésimas más rápido que el carismático surafricano.