El Marino, penúltimo de la clasificación del Grupo I de Segunda B con un punto, recibe hoy (11:00) en el estadio Antonio Domínguez al cuarto por la cola, el Sporting B, que supera a los tinerfeños en una unidad. Tanto el conjunto de Los Cristianos como el de Gijón llegan a la quinta jornada de Liga sin victorias en su estadística.

Los de Willy Barroso iniciaron el curso con dos derrotas, ante el Tenerife y el Getafe B, y no pasaron del empate sin goles en la visita del Coruxo a Arona. Siete días más tarde, el primer gol del Marino le sirvió de poco, pues cayó en el estadio del Marino de Luanco.

Por su parte, el filial del Sporting igualó a cero en las jornadas segunda y tercera, con el Sanse y el Alcalá, y cayó goleado en los otros dos encuentros: 4-2 frente al Fuenlabrada y 1-3 el pasado domingo con la UD Salamanca.

El entrenador local no podrá contar con Peraza, que deberá cumplir hoy uno de los dos partidos de sanción con los que la Federación Española le castigó por su expulsión con roja directa en la jornada anterior. Y también tendrá que prescindir de Rayco y Noda. El primero se reincorporó esta semana al trabajo con sus compañeros después de recuperarse de una operación quirúrgica que le realizaron el 3 de septiembre, pero todavía no está en condiciones de competir. Entretanto, Noda sigue de baja por la fractura de pómulo que sufrió hace dos domingos, jugando ante el Coruxo.

Barroso está convencido de que la primera victoria del Marino "llegará en cualquier momento", y confía en que sea hoy. "Nos hemos conjurado para lograrlo en el encuentro con el Sporting B", advierte. "Necesitamos ganar ya, pero no hay que tener ansiedad", afirma un entrenador que está conforme con el juego que está desarrollando su equipo. "Estamos compitiendo bien y los rivales no están siendo superiores, pero por unas causas o por otras hemos perdido o empatado. La primera victoria nos dará tranquilidad. A partir de ahí, se verá todo distinto".

El entrenador del Sporting B jugó ocho temporadas en el Barcelona, además de cinco en el equipo de El Molinón y otra más en el Alavés, todas en Primera. También fue internacional absoluto por España. Se trata del asturiano Abelardo Rodríguez, que tiene a sus órdenes una plantilla con una media de edad de 20 años, y que para la visita al Marino convocó a seis juveniles, tres de 17 años y otros tantos de 18. Con esta materia prima trata de cumplir con la tradición de la escuela de Mareo. "Tener el balón es nuestra idea, pero sabemos que no será fácil porque al Marino también le gusta jugar así y tiene gente en el centro de calidad, como Raúl Barcos".