Los vecinos del barrio de La Verdellada no salen de su asombro por la intervención de una unidad de la Policía Nacional la tarde de este lunes 28 de marzo en las calles del barrio de La Verdellada, sin razones que justifiquen tal despliegue, salvo un "cumplimos órdenes superiores" que le dijo a una vecina uno de los agentes implicados, como denuncia la asociación de vecinos Los Verdeños.

Este hecho ha llevado, según el edil de la zona, Jonathan Domínguez, que afirmó haber visto "cómo incluso actuaron de malas formas con niños, jóvenes y personas mayores", a que el ayuntamiento haya pedido explicaciones al subdelegado del Gobierno. "Queremos -añadió- que nos justifiquen los motivos para actuar de esta forma a dedo y sin haber problemas en nuestro barrio. Creo que la Policía Nacional hizo una exhibición de mal gusto, innecesaria y fuera de lugar".

Según la asociación vecinal, fueron varios los vehículos de la Policía que entraron en el barrio y "los agentes comenzaron un cacheo a diestro y siniestro de todos los jóvenes que se iban encontrando a su paso, además de la detención de vehículos que entraban, pidiendo documentación con agentes armados, una acción que ya ha hecho este cuerpo varias veces en los dos últimos meses, pero nunca a punta de subfusiles".

La intervención comenzó con el posicionamiento de vehículos en varios puntos del barrio, saliendo luego un despliegue del cuerpo especial, como si de los GEO se tratara, vigilando las esquinas, "armados -dicen los vecinos- con subfusiles y con gesto desafiante a todo vecino que se cruzaba". En la calle Timoteo Alberto Delgado, las intervenciones de este tipo, con cacheos a jóvenes y peticiones de documentación, han sido frecuentes en los dos últimos meses por el CNP, pero nunca, afirman los vecinos, "con el exhibicionismo de armas, algo que nos ha sentado muy mal a todos".

Tras su actuación en la citada calle del Lomo de La Verdellada, donde no detuvieron a nadie ni encontraron nada, la caravana siguió su "bochornoso espectáculo" por diferentes puntos del barrio, deteniendo y cacheando, así como pidiendo documentación a la mayoría de los jóvenes y vecinos, incluido el presidente de la asociación juvenil del barrio, en la zona de la plaza Mayor.

En este punto del barrio, donde había bastantes niños y mayores que se asustaron con la acción policial, los agentes pararon sus vehículos en mitad de la calle con frenazo incluido. "Saltaron -añade la asociación de vecinos- los muros de la plaza, armados hasta los dientes, realizaron peticiones de documentación con tono intimidatorio a los allí presentes, junto al centro cultural del barrio. Con esta actitud los agentes causaron unas situaciones de pánico y llantos a niños y ancianos que recordaron tiempos pasados".

Los vecinos están de acuerdo en que se garantice la seguridad y que los agentes cumplan con su labor, pero a lo que no están dispuestos es a que "la Policía Nacional haga intervenciones de película, donde buscan más el el espectáculo y la exhibición de poder que cumplir con su labor, porque con ello están generando una sensación de malestar y hastío vecinal nunca vista en el barrio contra el cuerpo estatal, algo a lo que no se debe llegar".

Según la portavoz de la Policía, la unidad que intervino fue el Grupo Opertativo de Respuesta (GOR) y no la UIP. Añade que los agentes no portaban subfusiles y actuaron a petición de los vecinos y que no han recibido ninguna denuncia. Además, señala que este mes se han levantado 10 actas por tenencia de drogas en la Verdellada y que en una actuación conjunta en la Verdellada, Finca España y la Candelaria se identificó a 27 personas, se levantaron seis actas, se controlaron 25 vehículos y se detuvo a una persona por reclamación judicial.

EL DATO

Repulsa de los comerciantes

Varios comerciantes del barrio mostraron ayer su repulsa por estas intervenciones policiales "excesivamente propagandísticas -dijeron-, que parecen buscar más el lucimiento de las metralletas del CNP que garantizar la seguridad de los vecinos, al tiempo que generan una sensación de inseguridad que afecta y mucho a los comercios del barrio". Los comerciantes coinciden en pedir que se garantice la presencia de la Policía, incluso si fuera necesario con controles, pero siempre con educación y respeto, y nunca con "modales groseros y ofensivos ante los ciudadanos, que al fin y al cabo son los que les pagan el sueldo, frente a la actitud generalizadora que hacen los agentes tratando a todos como delincuentes". La presidenta de turno de la Federación de asociaciones de La verdellada Unión Verdeña, Ana Pérez, coincidió en todo con los comerciantes, afirmando que es positiva la presencia de la Policía en el barrio, pero "para prevenir, vigilar y ayudar a los ciudadanos y no para generarles pánico o para exhibir su fuerza y crear malestar de manera innecesaria". En esta misma línea la Coordinadora General de Unión Verdeña y a su vez presidenta de la Asociación de Mujeres Lourdes, Matilde Figueroa, dijo que lo vivido el pasado lunes "no se había visto nunca, ya que la Policía fue vista como el problema y no como la solución, ya que un agente con metralleta en una esquina no es síntoma de seguridad sino de preocupación". Varios alumnos de la Escuela Oficial de Idiomas y del colegio La Salle también sufrieron la actuación de la UIP, siendo cacheados cuando salían del centro con sus libros. Uno de estos alumnos de la EOI, que no quiso decir su nombre, aseguró que lleva tres años en la escuela, y nunca había visto esto, "ya que el barrio de La Verdellada se caracteriza por ser una zona tranquilo".