Rider Producciones, productora que organizó el Winter Music Festival el pasado miércoles en La Laguna, ha querido pedir disculpas a los vecinos que, por la proximidad al lugar del concierto, tuvieron que soportar ruidos y otros inconvenientes, al tiempo que han expresado su gratitud al colaborar con su sacrificio a que el festival se hiciera realidad.

En una nota de prensa, el director de Rider Producciones, Martín Rivero, ha querido dejar claro que un festival de estas características siempre producirá molestias a terceros, perturbaciones que la organización "intentó reducir al mínimo con una gran preocupación por parte de los promotores, tal y como se demostró dirigiendo el sonido al interior del recinto". Además, asegura que por parte de la productora "se cumplió con las recomendaciones del alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, en cuanto al horario".

Martín Rivero ha explicado que el festival se inició a las 17:00 horas "a medio gas de sonido", mientras que a las 20:00 horas "se subió el sonido dentro de los mínimos habituales en conciertos y finalizó, con precisión suiza, a las 2:00 horas, una hora antes de lo previsto, por lo que se hizo un esfuerzo por responder a las demandas de los vecinos y, además, por concentrar las actuaciones en la nueva franja horaria".

También incidió en que los huéspedes de la Residencia de Ancianos Hogar Santísimo Cristo de La Laguna "quizás fueron los que menos resultaron afectados por el ruido debido a que su edificio estaba de espaldas al escenario y a que dicha residencia goza de un sistema especial de insonorización para poder celebrar fiestas y conciertos en la plaza del Cristo".

El responsable de Rider Producciones hizo hincapié en que la organización "se esmeró en que todo discurriera con normalidad y perfecto orden". Es más, aseguró que en el interior del recinto "no se registró el más mínimo incidente".