El equipo de gobierno del Ayuntamiento de La Laguna aprobará en el pleno de mañana las nuevas tarifas del suministro de agua, que implican una subida mensual de casi dos euros en el recibo, y que vienen justificadas por el preceptivo informe de la compañía Teidagua. Dicho estudio establece, entre otros aspectos, que la diferencia que se produce entre el volumen suministrado y el facturado por la compañía se debe fundamentalmente a las pérdidas en la red, a los errores y subcontajes en los equipos de medida y a los consumos ilegales y fraudulentos. De acuerdo a estos datos, en La Laguna existen unas pérdidas en torno al 13,5% del agua suministrada, lo que equivaldría en 2012 a 1.440.553,41 metros cúbicos.

El grupo municipal de Por Tenerife ha criticado que este informe no se conciba como un estudio comparativo de costes, sino como una documentación hecha para justificar las tarifas propuestas y las que ya existían. Así, por ejemplo, no existe ningún elemento de contraste sobre el volumen de agua perdida que se cifran "a ojo de buen cubero".

Por otro lado, censuran que no se presenten datos comparativos en el capítulo de gastos de personal. El mismo estudio de Teidagua estima para 2012 menos demanda de agua, pero este dato no lleva aparejada una reducción de las necesidades de personal. Por el contrario, aumenta un 7,8%, fundamentándose en el cumplimiento de las condiciones del convenio colectivo y en incrementos de personal, sin explicitar cuáles.

Otro asunto que genera controversia es el coste de los análisis del control sanitario de las aguas que entre 2010 y 2012 solo han pasado de 56.772 a 58.486 euros, por lo que, pese a las críticas del ahora primer teniente de alcalde y concejal de Aguas, Javier Abreu (PSC), sobre la pésima calidad del agua de abasto en el municipio, la partida para conocer su calidad química y bacteriológica no refleja ningún aumento significativo inherente a un cambio de prioridades.

Asimismo, desde Por Tenerife alertan de que el estudio de Teidagua concibe las comparativas entre ejercicios anteriores como un "truco contable" para simular un esfuerzo en la contención del gasto en 2012. Así, las partidas de costes entre 2010 y 2011 se incrementan, de forma injustificada, hasta casi en un 40% (pese a que no existió ninguna subida de tarifas en esos años) para efectuar en 2012 una supuesta contención del gasto.

Por ejemplo, la partida de gastos de aprovisionamiento pasa de 683.507 euros en 2010 a 785.799 euros en 2011 (un 15% más), para luego bajar en 2012 a 779.963 euros, sin que, en ningún caso, queden justificados los incrementos o decrementos de partidas a lo largo del informe. Igualmente ocurre en la partida de conservación y mantenimiento, que pasa de 1.015.918 euros a 1.184.679 euros entre 2010 y 2011 (un incremento del 16,6%) y en 2012 baja a 1.159.100 euros; o en energía eléctrica que pasa de 152.324 euros en 2010 a 209.892 euros en 2011 (un 37,8% más), para mantenerse en 2012 en los 209.892 euros. Por otro lado, los contratos con terceros para el servicio de depuración (cuyo servicio tiene un déficit de 985.900 euros) ascienden en 2012 a 2.288.588 euros (cuando en 2010 sobrepasaban escasamente el millón de euros).