"Me han despertado a mi hija y por ello soy muy feliz". Así se expresó Reyes Martín Febles, madre de la niña Kiara García Martín, quien, con sus palabras, demuestra que los niños autistas, desahuciados, pueden ser tratados y lograr grandes avances en La Escuelita de Ilusiones, donde, después de que a la citada niña médicos de Madrid no le dieran perspectivas positivas de cara al futuro, Kiara ha evolucionado positivamente, recuperando su madre la fe que le hicieron perder fuera de Tenerife y, como precisa, "ahora la ilusión me desborda por los grandes avances que veo en mi pequeña cada día, con grandes pasos hacia una mejor calidad de vida".

Pero el éxito en el tratamiento que ofrece la citada escuelita radica en el excelente equipo de terapeutas que posee y en que es el único colegio de España de niños autistas con aplicación de la técnica de tratamiento denominada ABA, que, como explica el director del centro, Arquímedes Fernández Valdés, "es validado científicamente, y que ha demostrado que aproximadamente la mitad de los niños con conductas autistas que reciben este tipo de enseñanza en condiciones ideales pueden ser integrados en aulas normales. Mientras, todos los niños, aprenden un número importante de habilidades que aumentan su nivel de calidad de vida e independencia".

Uno de los aspectos novedosos de la escuelita es la utilización del método Verbal Behavior (VB) de enseñanza del lenguaje funcional. Este método ha recibido el respaldo de más de 200 investigaciones científicas que lo califican como el modo más efectivo para enseñar comunicación a los niños.

Dada la importancia de La Escuelita de Ilusiones, hemos querido ser testigos de este centro, que está avalado por un Ayuntamiento de La Laguna y que, a pesar de la crisis, no está dispuesto a dejar de ayudarlo. El colegio se encuentra ubicado en Los Baldíos y, al llegar al mismo, la nota a destacar es la alegría presente en las madres y en sus hijos autistas.

En una sala del centro, hablamos con las madres, concretamente no solo con Reyes, sino con Carmen Lorenzo Trujillo, que además es presidenta de la asociación de padres y madres del centro, con Yaiza Suárez González y con Arquímedes Fernández Valdés, que no solo tiene una hija autista en La Escuelita de Ilusiones, sino que es director de la misma, la cual abrió después de contactar en Estados Unidos con la doctora Gladys Williams -que presta su colaboración- y aplicar los estudios y proyectos desarrollados en el campo del autismo como profesor de la Universidad de La Laguna.

Pero volvamos a Reyes Martín Febles, cuya hija Kiara García, de 7 años de edad, sufrió ataques de epilepsia a los seis meses de nacida, para cuando cumplió 18 meses diagnosticarle un Trastorno Generalizado del Desarrollo. Informó de que su niña estaba en un colegio normal y, tras ser valorada, le aconsejaron que Kiara debía estar en un aula en clave de un centro tinerfeño, donde estuvo dos años. "Pero mi hija -precisó- ni hablaba ni repetía palabras, por lo que busqué una solución que encontré en La Escuelita de Ilusiones. Lo que le ha pasado a mi niña es que ha conseguido lo que no le fue posible en el centro en el que estaba, pues a los tres meses de estar en La Escuelita de Ilusiones, empezó a repetir palabras, algo que antes no hacía, y a pedir cosas". Reyes, natural de la isla de El Hierro, vive en Granadilla, pero no es impedimento para viajar todos los días hasta La Laguna porque sabe que su hija cada día mejora.

Carmen Lorenzo Trujillo es madre de Ignacio, de 6 años, que llegó al centro de Los Baldíos con 3 años de edad. "Cuando a mi hijo -cuenta- lo valoraron me dijeron que no iba a sacar nada de él, pero la realidad, y eso me hace sentir muy feliz, es que ya habla, come y va al baño solo. Además pide de comer cosas, interactúa con su hermano y otros niños y es sumamente feliz, y el centro le viene tan bien que solo llora cuando se va del mismo, lo que me demuestra que La Escuelita de Ilusiones es muy buena para él".

Yaiza Suárez González es madre de Diego, de 4 años de edad, y su pequeño lleva en el centro lagunero desde septiembre del pasado año. "Le diagnosticaron -explicó- un especialista en neurología de Barcelona autismo clásico (Kanner) y me dijeron que lo único que iba a dar mi hijo que lo aprovechara al máximo, lo que me hundió rotundamente".

A partir de ahí, Yaiza empezó a buscar información hasta que encontró que lo que podía sacar a su niño adelante era el método ABA y que el único colegio que lo aplicaba era La Escuelita de Ilusiones. Al mes de acudir a la misma, Diego empezó a decir nombres como mamá o papá que antes nunca había dicho, luego a reconocer cosas y a pedir aquello que quería, como "mamá, ábreme la puerta", y todo ello lo ha logrado en solo 8 meses.

Yaiza Suárez recomienda, a las madres que tengan hijos autistas "que no estén conformes con la etiqueta que les pongan a sus hijos, sino que se muevan porque es posible que salgan adelante y tengan cada día una mejor calidad de vida".

Arquímedes Fernández informó del que el proyecto del centro que dirige nació con su hija Laura, que presenta el síndrome Rett, que es más grave dentro del autismo y le fue diagnosticado en Zaragoza a los dos años y medio de edad. La niña estuvo primero en un aula en clave durante un año y su maestra informó a su padre de que la niña no aprendía nada, animándole a abrir La Escuelita de Ilusiones.

Laura tiene en la actualidad 9 años de edad y, como destaca su padre, "el método la ha ayudado a que no retroceda y ha avanzado en áreas cognitivas.

El colegio no tiene ayudas sino del Ayuntamiento de La Laguna, su director espera que otros organismos oficiales o instituciones lo apoyen y fue abierto en 2006. Acoge a 38 autistas, 30 de los cuales son niños y 8 niñas. Son atendidos por un equipo formado por 14 terapeutas, una becaria, un doctorado, y 9 alumnos en prácticas de diferentes países.

Apoyo del ayuntamiento

Junto con las madres, se encontraba Cruci Díaz, concejal de Educación, que garantizó a los padres y madres y al propio director la continuidad de la subvención que les concede el ayuntamiento a través del área de Bienestar Social, "como prueba también de que es prioritario un proyecto como éste que apoya e impulsa el proceso de aprendizaje de estos niños y niñas con una labor individualizada e intensiva que han tenido una evolución importante y positiva en su lenguaje, comunicación y habilidades sociales".

Díaz valora esta iniciativa, "sobre todo porque en sí la Escuelita de Ilusiones, es un mensaje de esperanza, ilusión y esfuerzo para todos aquellos padres y madres que se encuentran desasistidos y que no saben qué hacer con sus hijos. Seguiremos apoyando este colegio, único en España, siempre desde el trabajo en equipo con esta comunidad educativa especial que tanto empeño pone a diario".