Con la llegada de la época estival, el campin de Punta del Hidalgo se oferta como una fórmula cercana para disfrutar del verano.

Desde este jueves, día 20, y hasta el próximo 30 de septiembre este recinto ubicado en la costa lagunera abre sus puertas para recibir la llegada de ese huésped "fiel", amante de la naturaleza, del litoral y del baño, que bien en tienda o caravana se siente como en casa.

Unos "precios populares" representan el reclamo de este modalidad de ocio alternativa, más si cabe en momentos de crisis. Pero, como cada año, planea el fantasma de la privatización, una medida que el pasado agosto encontró la oposición de los usuarios, que constituyeron una plataforma reivindicativa.

El concejal de Servicios Municipales, Javier Abreu, sostiene que "mientras se mantenga la implicación y el compromiso" de los dos operarios que trabajan en la instalación, desde el Ayuntamiento consideran que no será necesaria la privatización del servicio, que supone algo más de 100.000 euros de pérdidas anuales.

Por su parte, Carlos Concepción, uno de los integrantes de la Plataforma de Usuarios del Campin de La Punta, señala que ya le han trasladado al concejal la necesidad de "reacondicionar la instalación" y, en ese sentido, reclaman "una manita de pintura".

Sobre el mensaje recurrente del déficit de la instalación, Concepción intuye que es "menor de lo que se dice" y, en cualquier caso, asegura que "se está cargando sobre los empleados".

Lo fundamental, subraya este usuario, es que "no se incrementen los precios y se ajuste el gasto, porque una subida de las tasas repercutiría en una menor afluencia de campistas".

Carlos Concepción explica que el 70 o el 80 por ciento de los usuarios encaja en el perfil de parejas con hijos, "gente de la zona que ya acampaba desde antiguo" y que se pasan toda la temporada estival en el campin. Tanto es así que se han convertido en una "gran familia" que se reencuentra con la llegada del verano.

El camping ocupa 24.000 m2 de superficie y dispone de un total de 78 parcelas divididas en dos zonas: la superior, con 15 unidades (sólo para tiendas de acampada) y la inferior, de 63 (para caravanas, autocaravanas y casetas), con capacidad para 312 personas.

Las instalaciones cuentan con módulos de servicios en los que hay baños con agua caliente las 24 horas del día y, recientemente, sensores de luz para el ahorro energético. Asimismo, existe una sala de televisión y otra multiusos, en la que los usuarios pueden organizar celebraciones.

También dispone de un servicio de seguridad propio.