Como cada 9 de junio, coincidiendo con la fecha de su fallecimiento, la imagen de José de Anchieta procesionaba ayer por las calles de La Laguna cumpliendo así con el día de su festividad. Pero por primera vez lo hacía bajo la condición de santo, tras la firma de su "canonización equivalente" por parte del papa Francisco el pasado 3 de abril en Roma.

Antes de que la imagen del santo recorriera las calles de su ciudad natal, el obispo Bernardo Álvarez presidió una eucaristía en la Catedral, en la que destacó que esta fiesta debe "conocerlo un poco mejor, y que del conocimiento sepamos pasar a la admiración, de la admiración a la invocación, y de la invocación a la imitación".

La procesión, tras salir de la Catedral, tomó las calles Juan de Vera, San Agustín y Nava y Grimón hasta la plaza del Adelantado, donde ante la fachada de la conocida como Casa Anchieta tuvo lugar una ofrenda floral, para posteriormente subir la calle Carrera y regresar al templo.

Desde el pasado 2 de junio y hasta mañana, día 11, se vienen desarrollando unas jornadas diocesanas centradas en la vida y figura del santo José de Anchieta.

Precisamente, a mediodía del pasado domingo, el grupo Los Sabandeños interpretó un concierto homenaje al santo lagunero en la plaza de Santo Domingo.

El obispo entregó al director del grupo, Elfidio Alonso, una copia de la partida de bautismo del padre Anchieta, precisamente en la plaza de la parroquia que alberga la pila bautismal en la que fue bautizado este insigne canario. Igualmente, Álvarez agradeció su participación a este señero grupo