Los taxistas contrarios a los dos días de parada impuestos por la nueva ordenanza del Taxi del Ayuntamiento de La Laguna criticaron ayer la pasividad y la poca implicación del Cabildo de Tenerife para mediar en el conflicto que mantienen con la corporación local con respecto al desarrollo de la nueva regulación. Sobre ello, los profesionales del taxi críticos habían solicitado la suspensión del reglamento debido a las grandes pérdidas que, entienden, provocan los dos días de parada para el sector, así como la intermediación del presidente del Cabildo, Carlos Alonso, y el responsable de Movilidad, Manuel Ortega, para negociar esa suspensión con el propio Ayuntamiento lagunero.

En este sentido, la Sección Sindical de Trabajadores Autónomos del Taxi de La Laguna de SMC/UGT asegura que a principios del mes de septiembre había solicitado una entrevista con el titular del Cabildo, Carlos Alonso, cuestión que al final fue atendida por Ortega. La responsable de la Sección Sindical de Trabajadores Autónomos del Taxi, Lidia Torres, explicó que hubo, incluso, un problema de agenda por lo que al final Alonso no pudo sentarse con ello, emplazándoles Ortega a otro encuentro, pero sin determinar la fecha.

"El problema viene ahora. Parece que el objetivo político es dilatar lo máximo posible la reunión para dejar sin efecto nuestra reclamación, que es la suspensión cautelar de la nueva norma que fue publicada el pasado día 25 de diciembre de 2013 y que entró en vigor a principios de año. Ahora se nos echa el tiempo encima y vienen las navidades, por lo que tendremos que soportar muchísimas más pérdidas que las que tenemos, que era una de las cosas que queríamos evitar", señaló.

La responsable de la sección sindical apuntó que al día de hoy "seguimos sin tener noticias por parte del consejero de Movilidad, Manuel Ortega, sabiendo lo importante y urgente de sus actuaciones, ya que se aproximan unas fechas de gran movimiento comercial como son las navidades y el resto de fiestas que repercuten en todas las pequeñas y medianas empresas del municipio de La Laguna, y que se podrían convertir en nuestra tabla de salvación, un sector muy castigado durante los últimos meses desde que entró en vigor la ordenanza municipal".