El Casco Histórico de La Laguna ha sufrido muchos cambios a lo largo de los últimos tiempos, pero tal vez no tan profundos como cuando la Unesco lo declaró Patrimonio Histórico de la Humanidad (1999). Esta es una distinción que no todas las ciudades pueden atesorar, una cuestión que provocó profundos cambios para conservar y rehabilitar el esquema de ciudad que existía. En este sentido, la peatonalización de las calles y la rehabilitación integral de alguno de los edificios más emblemáticos han provocado que los cambios se hayan producido de manera lenta, pero concienzuda, aunque no siempre a gusto de todos.

De esta opinión es el presidente de la AV Casco Histórico, Pablo Reyes, un referente del movimiento vecinal con un mensaje muy claro y estudiado de lo que su colectivo considera positivo: "Y de lo no es, porque no me gusta la palabra negativo. Eso es así", llegó a decir, pero todo basado en lo que considera más importante: "La recuperación de la ciudad y sus calles para sus ciudadanos y visitantes".

Sobre ello aseguró que tras la peatonalización de las calles del Casco los residentes han ganado espacios que les eran necesarios y con ello "la proliferación de la actividad comercial, hostelería y restauración que han creado empleo, aunque sea en precario".

"También es importante la promoción de las actividades en la calle, aunque el ayuntamiento tendría que tener cuidado de no abusar por hacerlas siempre en las mismas zonas porque molestan a los vecinos", apuntó

Reyes, a pesar de lo expuesto, señaló que "en cambio, la peatonalización ha provocado la merma de aparcamientos. Si queremos aparcar, depende dónde vayamos, nos sale un ojo de la cara", dijo. Esa peatonalización también ha supuesto la necesidad de un mayor mantenimiento en las calles y plazas de la ciudad porque "han proliferado los hundimientos y roturas del pavimento y el aumento de humedad en los bajos de las casas terreras por el tipo de piedra utilizado".

El presidente de la AV Casco Histórico no desaprovechó la oportunidad para hablar de la conservación del patrimonio, aplaudiendo, sobre todo, "el incremento de la conciencia sobre la conservación, aunque en algunas ocasiones no se ha tenido en cuenta el debate ciudadano".

"Es el ejemplo de la plaza de la Catedral, en que la presión ciudadana ha incidido en la modificación continua de un proyecto que no estaba claro desde el principio. Además, no se ha tenido en cuenta el patrimonio intangible, no solo el arquitectónico. Creemos que no se ha defendido el comercio tradicional, el familiar, el de toda la vida, que son los que no pueden competir, y se ha impulsado la implantación de franquicias que acaban con las casas terreras... Bueno, deberían haber reglado mejor la inclusión de estos proyectos que acaban con pequeños cachos de historia", señaló.

Pablo Reyes, entre otras cosas, valoró positivamente las zonas ajardinadas y los servicios de recogida de basura y otros aspectos básicos, además de la creación de una unidad de policías locales de aproximación, "que realizan un trabajo impagable", pero "los vecinos echan en falta los equipamientos sociales, culturales y deportivos, y no me refiero a las entidades privadas, que no todos los que vivimos en el centro somos socios de algo".

"No tenemos nada. No tenemos centro ciudadano y ya ni instalaciones deportivas. Anchieta ya es un aparcamiento. Nuestra propuesta se centra en ampliar el IES Cabrera Pinto, hacia el aparcamiento de El Reboso. Se construirían dos niveles de aparcamiento y se techaría una cancha deportiva que podríamos utilizar los ciudadanos, como en otros sitios". Por último, criticó los grafitis y pintadas "lacra no ya solo en La Laguna, sino en todos los municipios".

Una gran falta de dotaciones deportivas en el casco

La AV Casco Histórico lamenta la falta de instalaciones deportivas y espera que se cree una detrás del IES Cabrera Pinto.

Importancia de los rincones recuperados para la gente

Reyes lo tiene claro. La declaración de Patrimonio de la Humanidad ha dado al Casco buenos rincones para vivir la ciudad.

Poca defensa para el comercio tradicional

Lamenta la poca defensa que existe para el comercio tradicional, que redunda en la proliferación de franquicias.