La Gerencia de Urbanismo de La Laguna ordenó ayer la paralización de la actividad del mercado de San Pablo al comprobarse que no se han cumplido algunas de las determinaciones incluidas en la comunicación previa y declaración responsable presentada por la empresa impulsora de esta actividad en 2014.

Según expusieron ayer fuentes de la Gerencia, durante el periodo de audiencia, que finalizó el pasado lunes, el promotor "no aportó documentación o proyecto técnico que acredite que las deficiencias detectadas se van a subsanar", por lo que se reafirma el primer informe técnico en el sentido de que las instalaciones ejecutadas para el desarrollo de la actividad "no se corresponden" con las autorizadas.

Por ello, la Gerencia de Urbanismo declaró la "invalidez" e "ineficacia" de la comunicación y declaración responsable presentada para desarrollar la citada actividad y ordenó la "paralización de la actividad".

El promotor de la recova gourmet, Pablo Montesinos, se había mostrado la pasada semana confiado en paralizar el cierre del mercado con las alegaciones que había presentado. Ayer, sin embargo, no fue posible conocer su versión.

Como se recordará, tras la visita realizada el pasado 13 de febrero de 2015, de la que informó este periódico el pasado 26 de marzo, los técnicos municipales comprobaron que existían varias deficiencias y así lo incluyeron en un acta que se levantó tras la inspección.

Entre otras, se detectaron problemas de extracción de humos en alguno de los establecimientos, así como que el sistema de extinción de incendios instalado no se corresponde con el proyectado.

Además, los técnicos municipales advirtieron de que la distribución del mobiliario y las dimensiones de los medios de evacuación no coincidían con los recogidos en el proyecto que se presentó en la Gerencia de Urbanismo, así como que la insonorización en cubierta y del resto de la actividad difería de la prevista en el proyecto.

El documento presentado en la Gerencia de comunicación previa incluía, asimismo, una unidad de tratamiento de aire que aún no está instalada, ni existe en la actualidad el suficiente número de servicios higiénicos para el público, según el aforo declarado.

Tampoco se cumplía, siempre según el informe de los técnicos, con la cámara de refrigeración para el espacio destinado al almacenamiento de residuos, ni con las condiciones de almacenamiento de los alimentos no perecederos, ni con el número de botiquines que debe haber en un espacio de estas características.

Además, había otras deficiencias como que no se ha podido dar de alta el centro de transformación o que la actual instalación eléctrica no se ajusta a la normativa de aplicación.