Los resultados electorales del pasado domingo se mantendrán inalterados. La Junta Electoral de La Laguna rechazó ayer la impugnación que habían solicitado Coalición Canaria (CC) y Partido Popular (PP) de dos mesas en las que, a su juicio, se habían producido irregularidades.

En concreto, la denuncia de CC y PP tenía que ver con la mesa única del distrito 1, sección 11, situada en la Gerencia de Urbanismo de La Laguna, y con la mesa B, distrito 1, sección 17, ubicada en Barrionuevo.

En el primero de los casos, nacionalistas y populares alegaban que la urna en la que se depositaban los votos se había roto, mientras que en el segundo denunciaban que un elector había depositado su papeleta en la urna sin permiso del presidente, comprobándose después que no le correspondía al elector votar en la citada mesa.

En ambos casos, la respuesta de la Junta Electoral es tajante. Para la primera cuestión dice que "no es causa invalidante" ya que tal y como consta en el acta de la sesión, los votos fueron "custodiados" en todo momento por los miembros de la mesa electoral y por el agente de policía, "procediéndose, una vez que se repuso la urna, a introducir todos los votos, contándose uno a uno y comprobando que el recuento coincidía con el total de votos emitidos".

Sobre el segundo caso, la Junta Electoral tampoco ve causa invalidante, ya que según se señala en el acta de la sesión "si bien un elector votó en una mesa que no le correspondía, no se le permitió votar en la que estaba censado, por lo que no se ha producido una duplicidad en el voto".

La decisión de la Junta frustra las ya remotas opciones que el PP tenía de ganar un concejal en detrimento de Unid@s se Puede. Un edil que hubiese impedido la mayoría que ahora tienen en el ámbito de la izquierda Unid@s, PSOE y XTF-Nueva Canarias.