El de Guamasa podría ser un programa de fiestas más, como otros tantos que se editan en el municipio de La Laguna. Sin embargo, en esta ocasión viene con sorpresa, y no solo por los actos que en él se detallan, sino por el mensaje que esconde.

Harta de que la iglesia de Santa Rosa de Lima se siga deteriorando sin que nadie actúe para evitarlo, la comisión de fiestas que este año se encarga de organizar los festejos en honor de la patrona del barrio ha decidido incluir en el programa, no sin cierta ironía, una llamada de auxilio del propio inmueble religioso.

"Por favor. Hagan algo. Me estoy deteriorando", dice el mensaje que podrán leer todos aquellos que se hagan con el programa de las fiestas de 2015, de cuya organización se ha encargado un grupo de personas que preside Santiago Rodríguez.

"Viene la fiesta -comienza el 22 de agosto- y la fachada sin pintar", lamenta Rodríguez, quien detalla que el inmueble no se pinta desde hace cinco años, cuando varios miembros de la comisión de fiestas decidieron hacerlo por su cuenta ante la cercanía de la celebración.

Pero lo de la pintura es un problema menor si se tiene en cuenta el estado del edificio. Y por ahí va el mensaje del programa.

Apuntalada la sacristía y con desprendimientos en varias partes del techo de la nave principal, la iglesia de Santa Rosa de Lima necesita algo más que un milagro para recuperar el esplendor del que gozó cuando fue construida por el arquitecto pucelano Mariano Estanga, a principios del siglo XX.

¿Quién es el responsable de ese estado? Los miembros de la comisión de fiestas responsabilizan directamente al Obispado de Tenerife, "que lleva veinte años recaudando fondos para mejorarla y ahí sigue, cada vez peor".

Eso sí, hacen una salvedad con el cura del barrio. "El padre Domingo -Domingo Marrero- trabaja bastante y colabora para sacar fondos" desde que está destinado aquí, precisa Santiago Rodríguez. Pero el deterioro continúa.

Y aunque se sigue ofreciendo misa en ella, estar en su interior no deja de tener ciertos riesgos. "Yo a mi mujer le digo que se ponga cerca de la puerta por si se cae algo", asegura otro de los miembros de la organización de los festejos, que lamenta, a su vez, la imagen de la iglesia que se encuentran personas de otros países que acuden a Guamasa a contemplar la imagen de su patrona.

La iglesia, ¿pendiente del nuevo Plan General?

A pesar de que los miembros de la comisión de fiestas acusan directamente al Obispado de Tenerife del mal estado de la iglesia, en una información publicada el pasado mes de febrero por este periódico, el presidente de la asociación de vecinos Santa Rosa de Lima, de Guamasa, Manolo Díaz, indicó que la reforma y mejora del inmueble religioso estaba pendiente de la aprobación del nuevo Plan General de Ordenación de La Laguna, un documento que volverá a someterse a debate político próximamente. El proyecto contempla una ampliación por el lado derecho (mirando de frente) y la construcción, en la parte de atrás, de un centro parroquial.