Tal vez no tienen la repercusión de las carretas elaboradas para la romería de San Marcos, pero el arte y el trabajo que tienen detrás les dan un enorme valor.

Más de medio centenar de teguesteros -y otros que no lo son- se afanan desde el pasado mes de junio en la elaboración de las carrozas que, desde hace 27 años de manera consecutiva, salen a la calle en homenaje a la Virgen de los Remedios. Una tradición de la que se tiene constancia fotográfica desde 1956.

En total, este año 2015 son ocho estructuras. Seis se elaboran en la finca Los Zamorano -allí está el grupo mayor- y las otras dos en otros puntos del casco.

Lo que comenzó siendo un montón de materiales, nuevos y, sobre todo, reciclados -la crisis no ha pasado, enfatizan-, se ha ido convirtiendo en puro arte, que nada tiene que envidiar a estructuras similares que se elaboran en otros puntos de la geografía local y nacional.

Y aunque los motivos -hechos por ellos, recalca Miguel Ángel Hernández- están más que avanzados, prefieren guardar parte del secreto para no romper el efecto sorpresa. Eso sí, avanzan que las carrozas de este año serán "una fauna".

Sin encargados específicos, cada colaborador sabe bien qué tarea hacer. Y el reparto resulta sencillo: cada uno le mete mano a lo que mejor se le da. Por ejemplo, el propio Hernández prefiere los detalles de pintura. Otras, como Eladia López, enfrascada todo el año en tareas relacionadas con las fiestas del pueblo, es experta en rellenar de purpurina. "Con los años hemos ido aprendiendo", reconocen.

Y la edad tampoco supone dificultad. Mayores y jóvenes se mezclan sin problema alguno. Al fin y al cabo, los años pasan y las carrozas tienen que seguir saliendo. El año que viene serán 28.