"Es la última oportunidad que van a tener los dueños de recuperar su vehículo". Que nadie entienda la afirmación del concejal del Seguridad y Tráfico del Ayuntamiento de La Laguna, Jonathan Domínguez, como una amenaza. Todo lo contrario. Casi podría entenderse como un ruego.

El Ayuntamiento de La Laguna iniciará en enero un expediente para enviar al desguace más de 200 vehículos que están en el depósito municipal desde hace más de dos años.

Los hay de casi todas las marcas y tamaños: un lujoso Jaguar, con matrícula TF-AB, apto para coleccionistas; una ambulancia de transporte; una pequeña furgoneta de una reconocida ONG; un camión de una empresa de muebles; un furgón frigorífico; motos de diferentes cilindradas, y utilitarios que en el momento de su retirada tenían una antigüedad inferior a los cuatro años, entre otros.

La idea es vaciar el solar de más de 2.000 metros cuadrados que el consistorio tiene en La Higuerita, en La Cuesta, al que van a parar todos aquellos coches, motocicletas, furgones y camiones que, una vez retirados de las calles del municipio, superan el año de estancia en el recinto que la empresa concesionaria del servicio de grúas tiene en el Camino de la Villa.

Las circunstancias que han llevado allí a cada automóvil son distintas. Embargos, empresas que quebraron, accidentes, averías... No obstante, todos tienen un denominador común: el abandono en las calles.

El concejal es consciente de que resultará difícil que algún propietario se acerque hasta las instalaciones municipales a recoger su coche si no lo ha hecho en dos años, o más.

¿Por qué? Dando por supuesto que las multas que iniciaron el proceso sancionador están ya resueltas, los dueños deberán abonar una media de 2.000 euros -en algunos casos más- para poder retirar el vehículo. Es el coste que han de pagar, a razón de siete euros al día, por haber ocupado durante tanto tiempo las instalaciones.

Por esta razón, Domínguez asegura que "se daría con un canto en los dientes" si, al menos un propietario, procede antes de final de año a retirar su coche, moto, camión o furgón de la propiedad municipal.

Claro que después de tanto tiempo algunos de los vehículos del depósito no solo han perdido valor, sino que no son rentables por su alto grado de deterioro.

Para los que sí lo son, el área que dirige Jonathan Domínguez quiere otra vía: la reutilización. Y es que paralelamente al expediente de destrucción, el consistorio también tramitará otro para tratar de recuperar algunos de esos automóviles para la Policía Local.

Se trata de varios furgones y algún coche, relativamente nuevos, que serían destinados al área de Tráfico. Con ellos, avanza el concejal, se atenderían cuestiones de movilidad y atestados, entre otros asuntos.