Reconoce que su decisión de quitar Aguas a Javier Abreu ha sorprendido incluso a los suyos, pero cree que se ha entendido y no piensa rectificar. Pese a esto, el alcalde de La Laguna, José Alberto Díaz, defiende aquí el pacto con el PSOE, lo sigue considerando el mejor a escala regional y local y cree que lo más probable es continuar en minoría hasta 2019.

¿Cuál es la situación real del gobierno ahora mismo?

Se constituyó el 3 de julio y hay que ponderar las cosas en el tiempo. La Laguna se ha caracterizado por ser referente en muchas cosas. ¿Hemos perdido eso? No. Creamos mayor empleo en proporción, hay dinamismo económico y eso significa que la política ayuda. ¿Las políticas de estos 6 meses han potenciado eso? En honestidad, es demasiado pronto para evaluarlo, pero sí hemos planificado 2016; presentado el DUSI y, si nos lo conceden, será una inversión altísima y una modificación de la estructura sur local: eso es trabajar y planificar.

¿Y no se ha manchado demasiado la imagen corporativa local?

Sí, hay una oposición muy virulenta con un discurso permanente de "esto no funciona" porque es lo que interesa partidistamente y porque parece que la reiteración del mensaje muestra debilidad. Y, encima, como el gobierno no tiene mayoría absoluta, parece que es así. Pero respondo con datos objetivos. La oposición dice que los plenos se hacen largos y sí, pero porque se ven las mociones de ellos, yo solo presento las institucionales. ¿Por qué no presentan solo las relacionadas con La Laguna y no de apoyo a Siria, pues estamos todos contra la guerra, o a favor de la visibilidad bisexual o de quitarle las medallas a Franco? Son elementos importantes, pero tienen la relevancia que tienen. De las 55 mociones, se han aprobado 44 y el gobierno solo ha perdido 6.

¿Qué no ha hecho que se lo ha impedido su minoría?

Nada.

¿Ha hecho todo lo que quería?

Hubiese dedicado más tiempo a resolver problemas de los ciudadanos que a contrarrestar ese discurso de la oposición, aunque tampoco le he dedicado mucho. Es el momento de decirle a la ciudadanía que esa apariencia no es real. La deuda no nos impide invertir, tenemos los ARU en marcha, paralizamos los desahucios de las viviendas de Visocan, el primer municipio que lo hace: si no se gobernara, esto sería imposible.

Pero la situación chirría: hay un pacto que un socio no firma y dice que se lo imponen; ha defenestrado a su líder de una competencia clave y ni cobra, ediles se ausentan para perder votaciones...

Vivimos una situación de discrepancia con respecto al pacto.

¿Y cómo se arregla eso?

Los dos partidos siguen creyendo que este es el mejor pacto.

Pero, ¿a escala regional, local, parte del PSOE sí, Abreu no...?

Lo de Abreu debe preguntárselo a él; lo que yo percibo a escala local es que las dos organizaciones pensamos que el pacto es bueno.

¿Es bueno mantenerlo en minoría todo el mandato?

Si resolvemos este nivel de distorsión puntual, creo que tenemos la capacidad suficiente para seguir. Y es que la gente está trabajando en sus áreas, el poder de la junta de gobierno es muy significativo, al tratarse de un municipio de gran población. Los plenos son básicamente políticos, no de gestión. Esto sigue funcionando, la maquinaria no se para porque no haya mayoría absoluta, se siguen tomando decisiones. Otra cosa es que quepa una censura o que no se apruebe el presupuesto.

Pero, ¿cómo arreglarán que al líder del partido con el que cogobiernan le quiten su área clave?

Espero que ambas organizaciones tengamos capacidad para eso; están reflexionando y debemos sentarnos a ver la solución.

¿Una solución puede ser Abreu llevando Aguas en el Cabildo?

Eso no es competencia mía. Javier es un profesional en el ámbito de la gestión pública e imagino que lo haría bien donde estuviese, pero, vamos, no es ese mi ámbito...

Eso suena fatal: parece un político profesional de por vida...

Bueno, no sé, aquí cada uno tiene su historia: no entraré en si uno u otro: yo llego en 2011; antes no.

Para usted, ¿cuál es la solución ideal, la menos traumática?

La garantía de que este pacto tiene un alcalde con un equipo de gobierno y con dos partidos.

¿Cuándo habló por última vez con Abreu de la situación?

De esta situación no, sino sobre el presupuesto: este martes.

¿Qué pasará con las cuentas?

Espero que gobierno y oposición tengan la capacidad suficiente para llegar a acuerdos puntuales.

La oposición dice que le falta información...

Eso siempre lo dice, pero hay que aclarar qué parte de la oposición, si la de izquierdas o la de C''s y PP.

Se quejan de que el gasto social baja un 5%...

Se debe a que no hemos logrado el periodo debido de pago de 30 días. Queríamos llegar en diciembre, pero no pudimos y la previsión es marzo, pues ya estamos en 40 y pocos días. De 14 millones de euros, que bajen unos 100.000 y pico, como dice Unidos Se Puede, no es tan grave, sobre todo porque no afectará tanto al ciudadano, ya que no todas las partidas se gastan y, luego, se puede cambiar. No se rechazará ninguna petición por problemas presupuestarios.

No convendría, pues, retrasar la aprobación...

No. La rueda sigue funcionando y tenemos muchos proyectos, como sacar a concurso todo el reasfaltado de calles.

Pero, si no se aprueban, ¿pueden seguir con cuentas prorrogadas o sería muy arriesgado?

Estoy convencido de que vamos a llegar a un acuerdo.

¿Con quiénes?

Intentaré que sea con cada grupo. Hemos hecho lo que nunca: sentarnos con cada uno para darle toda la información. Lo que pasa es que algunos son los negativos y llevan con su discurso desde el 3 de junio, incluso antes.

¿Si se repite lo de las votaciones en pleno, habrá ruptura definitiva por cuestión de imagen?

La imagen del municipio no la dan ciertos grupos de la oposición...

Pero fue su socio de gobierno...

Es una situación nada agradable, claro, y no sé si va a pasar de nuevo, aunque espero que no.

Si pasa, ¿debe ser el acabose?

No quiero pensar en eso, creo que no se volverá a producir y, si se da, tomaré las medidas oportunas. Pero esto no es un conflicto entre partidos sobre el proyecto para La Laguna. El municipio necesita un gobierno y lo tiene, creo que el mejor, y lo que necesito es unidad de criterio y acción, con un plan que es el consenso de dos proyectos y con total lealtad. Porque me ha tocado asumir la Alcaldía, vengo a desarrollar un proyecto como gestor público, y si estoy en la oposición, estoy. Tardamos en conformar el equipo, ya se sabe, pero hemos hecho toda una programación para estos 4 años: nos hemos reunido con todas las Ampas, los centros educativos... Si no, si hay una alternativa, que llegue la oposición y haga lo que tenga que hacer si son responsables. De lo contrario, que hagan oposición, pero que dejen de manchar y pintar todo de negro.

Pero todo continúa siendo chocante porque el PSOE sigue sin firmar, por ejemplo, esos 16 puntos que sí firmó el PP con usted...

Esta es una cuestión de partidos. Estoy en uno y me siento refrendado con el pacto...

Pero el PSOE en La Laguna, por lo menos Abreu, sigue diciendo que el pacto no lo firmaron ellos...

Eso lo dice Abreu, pero habrá que preguntarle al PSOE de verdad si cree si es válido o no. Por lo que he visto en la mesa del pacto, sí lo creen y exigen que se cumpla.

¿Calculó mal Abreu el órdago que le lanza con el ultimátum y quedó en evidencia en el PSOE?

(Risa facial y larga pausa). Cada uno marca su propia estrategia. La mía es gobernar y en eso soy leal con quien gobierna y la oposición.

¿Teme más ahora la censura?

Nunca la he temido. Cuando negociamos el pacto, en un momento lo rompí y expliqué que concebía un municipio con un alcalde y un pacto con dos partidos, y estoy en lo mismo. Yo no dependo de la política. Vengo a trabajar por los ciudadanos, arreglarles las calles, que no haya desahucios, renovar viviendas con los ARUS...

¿Le constan conversaciones en estas semanas en busca de un pacto de izquierdas?

Me constan desde antes de que fui alcalde. Sí veo que hay gente especialista en crear estados de opinión mediáticos sobre que esto es un desastre y que CC está dividida. En las últimas elecciones, nos presentamos unidos y los de Unidos fueron con Podemos unos y con IU otros. Puestos a desunir...

Habla de las elecciones: ¿el resultado congela un posible cambio en La Laguna y Canarias?

No. El mejor pacto en estos momentos es el del PSOE con CC.

¿A todas las escalas?

Sí. Aunque el PP ha ido rectificando sobre Canarias en los últimos meses, soy un defensor del pacto con el PSOE en las Islas.

¿No vislumbra, ni siquiera, un cambio en el Cabildo tinerfeño?

No.

¿Su perfil menos político y más técnico ha cambiado ya?

Me van conociendo más como soy. Lo hecho respecto a Aguas ha sorprendido porque la gente no pensaba que pudiera tomar una decisión así, pero es que soy así. Toda mi vida me he dedicado a tomar decisiones de gestión, y vengo a gestionar un municipio de manera cooperativa, siempre busqué la mayoría y el consenso con todas las ordenanzas que traje desde 2011, y salieron por unanimidad. Eso no quiere decir que tenga que aguantar cualquier afirmación, y se han dado cosas a las que hay que responder: he estado 6 meses diciendo que cada uno tiene su criterio, pero, al ver una deslealtad manifiesta, probada e indiscutible, actúo.

¿Abreu, que lo reclama, recuperará sus competencias sí o no?

Ya lo he dicho. Pero eso no es lo trascendente.

¿Y qué lo es?

Que hay un solo alcalde y un equipo de gobierno.

¿Se siente apoyado en la calle?

Sí, totalmente. Ya digo, sorprendió que diera ese golpe encima de la mesa, pero es algo de alcalde, de mandato, se ha entendido y nadie me ha dicho "te pasaste". Por otro lado, está el discurso cansino de la deuda y de que solo gastamos en fiestas o protocolo: la gente se aburre de eso y quiere que se hable de mejoras en casas, asfaltos, desahucios, de cómo pagar la luz y agua, cómo abrir cuanto antes un negocio, de si se puede pagar de forma fraccionada... Este es un municipio solidario, con políticas progresistas, que potencia la cultura, y hay unos que esto no les interesa y están permanentemente con un discurso negativo y diciendo que todos están divididos, salvo ellos...

Es fácil deducir que Abreu no recuperará Aguas: ¿y su salario?

Depende de dónde trabaje y de la mesa del pacto.

¿Y cuándo se sabrá eso?

Espero que sea lo antes posible.

¿Antes del próximo pleno?

Espero que sí. ¿Cree que tengo interés en dilatar la solución de esto?

Supongo que no, pero implica atacar a un líder socio, aunque Aguas siga en manos del PSOE...

Se debe cumplir el pacto en su integridad, que empieza diciendo que tenemos voluntad de gobierno con un alcalde y un equipo. Esa parte es el anexo. Y si gusta, bien; y, si no, no pasa nada. No podemos ponernos al nivel de los que dicen que esto no funciona con su canción machacona, sea o no verdad, siempre repitiendo lo mismo con los presupuestos. Espero que podamos construir y cambiar, pero no esperaré. El municipio sigue caminando y el que quiera acompañarnos, bien.

¿Entiende que el PSOE diga que CC no puede determinar qué edil socialista lleva qué?

Sí.

¿Y entonces?

Algo podré decir como alcalde. Soy respetuoso y me sentaré en la mesa del pacto con el PSOE, pero tampoco mi partido me puede decir quién va a un lado u otro. Tengo esa discrecionalidad. Eso es ejercer de alcalde: tener cierta autonomía y ya tengo mis decisiones adoptadas. No me conocen, pero yo ya tomé la decisión.

Abreu no volverá a Aguas...

No.

Alguien del PSOE sí...

Entiendo que sí, como que nosotros recuperaremos Anaga, que lo lleva ahora Abreu porque se lo di yo dentro de esa discrecionalidad. Si nos ponemos así, cada uno recuperará lo que le correspondía.

¿Cree que el PSOE lagunero aceptará o se le tendrá que imponer?

No entiendo que fuera una imposición; hay una pacto claro de gobierno consensuado entre las organizaciones locales, no solo por arriba. Y percibo que en lo local también hay voluntad de acuerdo.

¿Cree que el 20D hará cambiar a Ciudadanos en La Laguna y entrar en el gobierno? ¿Lo ha sondeado?

No lo he preguntado y no creo que cambie su postura.

O sea, La Laguna se expone a un gobierno en minoría 4 años...

Creo que sí, es la circunstancia más probable en la medida en que se pacifique todo e, insisto, es el mejor pacto. Se decía que el 20D lo iba a clarificar, pero puede haber nuevas elecciones. Hasta que no se calme el proceso estatal de configuración del gobierno, no tendremos tranquilidad en muchas corporaciones locales, y ya lo comprobé hace poco en la reunión de ciudades patrimonio.

"Espero resolver el PGO este mismo año"

Díaz se marca como uno de sus grandes objetivos resolver "este mismo año el PGO. Últimamente, se ha rebajado la tensión sobre el plan. Aunque hay gente con ese discurso negativo, me he encontrado con otra trabajando y defendiendo la zona donde viven, y con estos estamos cada vez más cerca de llegar a un acuerdo. Espero que haya suficiente altura de miras para que se apruebe: es un plan que va a durar, aunque ya no son de gran desarrollo e infraestructuras y dependen de los ciclos económicos con modificaciones puntuales. Queremos que sea una herramienta a utilizar y de futuro, si bien ya no es tan primario ocupar nuevos espacios para innovar, por ejemplo, empresas".

No cree malo para el PSOE que pacte con el PP

Sobre el 20D, cree que España necesita serenidad y altura de miras, aunque tiene claro que el resultado dificulta mucho la gobernabilidad y considera muy probable que haya nuevas elecciones. "Y es que es difícil aunar esfuerzos para cogobernar, se quiere nadar y guardar la ropa y otros dicen ser la esperanza, pero son inocuos, pues solo pueden serlo con mayoría absoluta, y ya se verá lo que hacen". A su juicio, la única opción de evitar otra cita con las urnas es un pacto entre PP y PSOE que, a diferencia de muchas opiniones, él no vería como un suicidio de los socialistas. "No entiendo por qué: el PSOE es un partido de Estado de siempre, con cercanía a las autonomías y un discurso más cercano a las políticas territoriales de País Vasco y Cataluña. Luego pasan cosas como lo de la CUP, que me resulta curioso porque son partidos que se presentan para gobernar y tardan 3 meses en decidir". ¿Otras elecciones no reforzarían al PP y Podemos? "No creo que en un plazo tan corto se produzcan cambios tan claros; más bien pienso que los partidos más históricos tendrán más peso". ¿El PSOE incluido? "Creo que sí". Pero, ¿qué PSOE, el de Sánchez, el de Susana Díaz...? "Tendrán al final uno. El PSOE tiene una cultura de visibilidad detonante, se va amputando expectativas de crecimiento, pero es un partido con historia y discurso". ¿No cree que con Podemos y C''s erosionándolo puede debilitarse como Jospin en Francia en 1997, como el desaparecido Partido Socialista italiano o el PASOK griego...? "Sí, son momentos de cambio y no tengo una bola de cristal, pero mi percepción es que el PSOE es un partido moldeable y con conceptos históricos claros, aunque esté en crisis".

Sobre CC y su resultado en La Laguna, dice que tienen que reflexionar, achaca la situación en las urnas a los cambios vividos y no teme por el futuro.