El Ayuntamiento de La Laguna trabaja para que el próximo verano esté finalizado todo el trabajo previo a la reposición de las primeras viviendas de Las Chumberas, que lleva años de lucha contra la aluminosis. Según fuentes oficiales de la corporación, el objetivo es que en esas fechas, o incluso un poco antes, se cuente ya con la redacción de los tres proyectos -edificación, urbanización y demolición- correspondientes a toda la primera fase.

Es la Sociedad Municipal de Viviendas de La Laguna (Muvisa) la que está preparando la redacción de esos documentos para renovar 188 viviendas, de las que 108 entraban en el convenio de 2015 y 80, en el de 2016.

Cabe indicar que la previsión con respecto a la redacción del proyecto de edificación es que a finales de mes o a principios de marzo pueda ser adjudicado a una de las 17 empresas interesadas. Al mismo tiempo, añaden desde el consistorio, los técnicos de Muvisa trabajan para la redacción de los proyectos de urbanización y demolición, con el fin de que estén culminados en verano. A ello se une el trabajo administrativo de la Gerencia de Urbanismo.

"El ayuntamiento está en contacto permanente con los vecinos para ir resolviendo los problemas puntuales que surgen y asesorándolos respecto a cualquier duda que tienen", completa la concejala de Vivienda, Flora Marrero, sobre la labor municipal. "Los técnicos están haciendo un gran esfuerzo para sacar adelante los proyectos a tiempo, pero es necesario que se convoque la Comisión de Seguimiento del Convenio para empezar a tramitar la firma del correspondiente a este año y que nos permitirá completar la primera fase hasta las 188 viviendas", añade al respecto la edil.

Entrando en mayor detalle sobre los pasos necesarios, se requiere la firma del convenio que regula la financiación del 2016 a los efectos de poder ejecutar la totalidad de la reposición de las viviendas contempladas en la primera fase, y para ello el Ayuntamiento de La Laguna ha solicitado a las demás administraciones que nombren representantes en la referida comisión, así como la "urgente convocatoria" de dicho órgano para tratar el borrador del convenio y su posterior aprobación y firma por las distintas administraciones.

En adelante quedarán el resto de bloques (450 viviendas) de una urbanización que fue edificada en 1973 y que en 2009 conoció que sus edificios sufrían aluminosis, la que algunos denominan "la enfermedad del cemento". Después de años de promesas, reuniones, tiras y afloja, y momentos de júbilo y decepción, el pasado 4 de noviembre el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo; la ministra de Fomento, Ana Pastor, y la vicepresidenta regional, Patricia Hernández; el máximo responsable del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, y el alcalde de La Laguna, José Alberto Díaz, suscribieron el ansiado convenio. El deseo desde entonces hasta ahora: que comiencen por fin las obras.

"Tienen que firmar ya la segunda subfase"

"Tiene que haber una exigencia máxima antes de que se vaya este gobierno para no comenzar a negociar con otro, y que firmen ya la segunda subfase de la primera fase". Lo dice el portavoz de los afectados por la aluminosis en Las Chumberas, Ricardo González. "Nosotros aspirábamos a que todo fuera en un proyecto único, pero, por las condiciones económicas del país y la tardanza para hacer todo eso, no podíamos esperar más", sostiene la cara más visible de las reivindicaciones que iniciaron los vecinos de esta zona tras conocer el problema de sus viviendas.

Según explica, lo que han vivido durante los últimos años supone incluso un desgaste "psíquico". "Es muy fastidiado pasar las Navidades compartiendo los adornos con puntales; no quieres mostrarle a la gente tu casa...", señala, antes de hablar de los nietos que hace años pasaban más tiempo que ahora en casa de sus abuelas, dado que a los padres les da cierto miedo que estén allí mucho tiempo. "Yo conozco un caso en que los niños juegan con los puntales", detalla sobre una de tantas historias en torno a unos elementos que desde hace años son parte indisoluble de la vida de los vecinos de este ámbito.

Allí se han quedado aquellos cuyos domicilios presentan una afección menor, mientras que otros han sido realojados. Para todos, estos días pueden ser importantes o, al menos, un pequeño paso más en su espera. Y es que, según expresa el portavoz, algunos propietarios han sido convocados para explicarles el proyecto de manera pormenorizada. Eso quiere decir que la solución definitiva está más cerca.

En cualquier caso, siguen quedando cientos de viviendas. Cuantifica González que la cifra de domicilios que quedarían asciende a 450, de los que 188 son los que están incluidos en la primera fase del convenio. Eso, reconoce, genera incertidumbre especialmente en los que esperan por una etapa posterior del convenio que no llega.