Vecinos del entorno del ámbito de la calle Pista Militar, en el pueblo de San Roque, reclamaron ayer al Ayuntamiento de La Laguna la mejora de la parte alta de carretera, la que da acceso justamente a varias viviendas y a las instalaciones de telecomunicaciones de este enclave lagunero. Además, piden la implantación de medidas de seguridad en algunos tramos de la carretera general como pueden ser la dotación de vallas para hacer seguro el tránsito de los vecinos por los márgenes de la carretera.
Destacan que desde hace años sufren por el estado de las carretera. Señalan que "a pesar de ser pocos los que vivimos allí, también tenemos necesidades y que las pocas infraestructuras que tenemos estén en buenas condiciones", dijo el denunciante.
Enfocó el problema en el tramo conocido como Pista Militar de Arriba. Justamente en su comienzo existe un gran socavón que se ha hecho más grande con el paso del tiempo. "Más bien parece que la carretera se hizo con materiales de mala calidad porque el tráfico tampoco es tan grande como para producirse este tremendo agujero".
Los baches y los hundimientos de la plataforma transitable son muy abundantes a lo largo de la carretera hasta llegar al asentamiento de la parte alta, junto a las instalaciones de telecomunicaciones que se encuentran coronando la atalaya.
Allí existen, al margen de las viviendas, varias explotaciones ganaderas y otro pequeño núcleo de casas que dan a Valle Tabares.
"Nosotros también tenemos derecho a tener nuestras carreteras bien. No somos ganado para que nadie se preocupe por nosotros", criticó con cierta vehemencia uno de los vecinos consultados.
Pero no solo preocupa a los vecinos el estado de la carretera en la parte alta. También en la parte principal de Pista Militar, a la altura del número 40, existe un acceso de entrada a una de las viviendas. El mismo se encuentra a desnivel en relación a la carretera y se encuentra sin protección.
Los vecinos de esta parte baja de San Roque reclaman al ayuntamiento que se ponga un vallado para proteger a los vecinos que a diario pasan por esta parte "antes de que suceda una desgracia. Hasta que no pase nada, no van a mover ni un dedo", dijo uno de los vecinos que se fue uniendo al grupo.