Residentes y visitantes del Casco denunciaron ayer el sistemático incumplimiento de la ordenanza que regula la carga y descarga en las zonas peatonales de la ciudad, un problema que incluso ha generado incidentes entre los trabajadores y los vecinos.

En este sentido, es normal que camiones y vehículos trabajen por las zonas peatonales al margen de la limitación establecida por el ayuntamiento en el Casco, que permite los trabajos entre las 08:00 horas y las 11:00. A pesar de esta limitación, la Policía Local de proximidad es flexible con esta franja horaria aunque tampoco puede realizar su servicio en todas las calles que comprenden este ámbito.

Son precisamente los abusos con la limitación de carga y descarga los que han provocado incidentes con los vecinos, motivo por el que un grupo de ellos ha denunciado a EL DÍA sus problemas vividos.

El último ocurrió hace unas semanas cuando sobre las 13:00 horas (ya pasado ampliamente el horario establecido) un vecino que caminaba por la calle Viana fue increpado por el conductor de un camión "porque iba demasiado despacio".

"Me sentí como un idiota porque encima parecía culpable de tener las piernas mal y de que por uno de los lados hubiera un coche descargando en un restaurante de los que hay detrás del colegio San Agustín. Fueron mis compañeros que estaban delante de mí los que me defendieron y el señor ni se puso colorado", explicó don Juan, vecino de Anchieta.

Aseguró que lamentablemente "la policía nunca está cuando se necesita. Ya los coches se han adueñado de las calles y al final somos los perjudicados", destacó uno de los acompañantes, que apuntó que no es la primera vez que es testigo de una pelea de este estilo.

Señalaron que el problema no es solo que pasen por las zonas peatonales fuera del horario establecido y que se generen incidentes por ello, sino que también dentro del horario permitido es habitual que los camiones o coches de reparto estacionen a la entrada de las casas o de los comercios.

"Es lamentable que uno salga de su casa y se encuentre un muro delante o que un coche impida el paso sin dificultad a la calle. A diario se puede comprobar. También delante de comercios en los que no se deja nada", añadió otro de los denunciantes señalando con cierta ironía un vehículo que sobre las 12:35 horas aguardaba frente a un comercio hace unos días.

Los vecinos reclaman que el Ayuntamiento de La Laguna haga cumplir la ordenanza, "que para eso está", y que se eviten situaciones como las descritas.

Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Jonathan Domínguez, defendió con vehemencia el trabajo de los Policías Locales de la Unidad de Vías Peatonales, que velan por el cumplimiento de la ordenanza, reconociendo, no obstante, la dificultad del problema y la necesidad de equilibrar las medidas y las demandas vecinales, empresariales e incluso turísticas, "tres visiones a las que une la de la administración".

"Hay varios problemas en el Casco Histórico y lo intentamos resolver de la mejor manera posible" y estudiando propuestas vecinales al respecto.

"Es cierto que hemos detectado a empresarios que no están cumpliendo con la normativa y vamos a tomar medidas. Se ha optado por dialogar, pero la reincidencia se va a multar en aras de fomentar la convivencia entre los sectores", concluyó Domínguez.