Las AV La Laderita y La Ratona de Valle Tabares denunciaron ayer la "mala ejecución" de las obras del acceso a La Laderita desde la carretera general de Valle Tabares, una infraestructura que ha generado muchísimos problemas a los vecinos de esta zona. Tanto es así que han amenazado con hacer movilizaciones y cortes de la carretera si desde las administraciones, tanto Cabildo de Tenerife como Ayuntamiento de La Laguna, no obligan al promotor de las obras a corregir a cualquier coste los defectos e irregularidades detectadas.

Así lo señalaron los presidentes de ambas asociaciones, Ramón Álvarez y Fernando Rodríguez, quienes señalaron para empezar que la nueva vía "está mal compactada y carece de muros de hormigón. La han hecho sobre un relleno que se compactó inadecuadamente y ya se está desplazando y rompiendo la plataforma. Pedimos que el Cabildo o el ayuntamiento hagan catas para certificar la estabilidad del terreno", dijo el primero.

Precisamente, Ramón recordó que el promotor de las obras es un privado, el propietario de la gasolinera, quien, en su opinión, ha ejecutado mal otras obras complementarias del acceso. Es el caso del imbornal de recogida de aguas, que está conectado al alcantarillado. Como puede comprobar el mal olor es insoportable y eso que estamos en invierno. Tenemos que estar con las ventanas cerradas en nuestras casas", denunció.

Por su parte, Fernando advirtió de los problemas del acerado prometido por parte del ayuntamiento y contemplado como parte del proyecto de obras. Al respecto, Fernando criticó que "no existe acerado para llegar a la parte alta de la carretera. Pusieron el vallado protector, pero dejaron poco espacio. Luego ampliaron la zona de piche que colocaron, pero no dejaron ninguna acera ni para un lado ni para el otro. Los vecinos de La Laderita están encerrados", apuntó.

Critican, además, que "no hay paso de peatones a la altura de la rotonda, por lo que los vecinos de la zona alta que quieran llegar a El Rosarito tienen que saltar la valla. Es lamentable que hayan dejado hacer lo que les diera la gana sin que nadie haya vigilado".

"Tenemos claro que si no arreglan las cosas cortaremos la carretera o nos manifestaremos", advirtieron muy enfadados.