La empresa Teidagua detectó durante el año pasado un 17% más de fugas ocultas en la red de distribución de agua con respecto al ejercicio 2015, un dato muy positivo que ha permitido la actuaciones concretas para corregir los problemas de la red de abasto tras la implementación de medidas tecnológicas para su detención.

Se trata de uno de los datos extractados de la estadística de la empresa gestora del agua en Aguere junto a la Concejalía de Servicios Sociales, que dirige Mónica Martín.

Otro de los datos importantes es que se el número de averías visibles detectadas se elevó a las 2.921, lo que supone un 3% más que las registradas el año anterior, que se situó en 2.827. Durante el 2016, los técnicos de la empresa llegaron a inspeccionar un total de 3.200 kilómetros de red, un 2% más que en 2015, que fueron 3.151 kilómetros.

Por otra parte se especifica que el número de contadores viejos cambiados se incrementó un 15%, pasando de los 4.491 de 2015 a los 5.292 del año pasado. De la misma forma, el número de contadores cambiados por avería descendió un 16%, ya que en 2016 se sustituyeron por este concepto 379 frente a los 438 del año anterior.

Por último, otro dato importante es el relativo a la renovación de la red de distribución, ya que durante el año pasado se cambiaron 4,7 kilómetros frente a los 2,37 de 2015, lo que supone un 50% más de sistemas renovados.

La edil del área de Aguas, Mónica Martín, señaló al respecto que "las fugas ocultas son una fuente silenciosa de desperdicio de agua y por eso son tan importantes los avances que hemos conseguido en los últimos tiempos.

"La alta cualificación de nuestro personal, la apuesta por la última tecnología y la larga experiencia en diversos campos que abarcan el ciclo integral del agua hacen que nuestra empresa actúe con una eficiencia y una garantía ampliamente demostrada", explicó.

El gerente de la empresa, Félix Armas, valoró muy positivamente los datos obtenidos durante el año pasado, incidiendo, precisamente, en el mayor número de fugas ocultas detectadas en la red. Sobre ello señaló que las claves se encuentran "en la sectorización y el telecontrol, así como en instrumentación de detección de fugas, lo que ha permitido localizar un 17% más de fugas que durante el año 2015".

Apuntó que la instalación de los nuevos contadores "ha permitido trabajar sobre la parte no medible al adaptarlos a los consumos. Con esto se ha logrado obtener una mejor calidad de medición y un registro más real, ya que iguala el agua suministrada con la registrada".