La comisión que investiga el caso Grúas ha dado por cerrados los trabajos de análisis que han acontecido para determinar alguna responsabilidad acerca de los procedimientos llevados a cabo por las irregularidades denunciadas por los antiguos trabajadores y parte de la oposición, principalmente Unid@s Se Puede (USP) y Por Tenerife-NC (XTF-NC). Los representantes de la comisión han concluido que el foro "no debe intervenir ni interferir en asuntos que están siendo conocidos por la Justicia y por ello procede a la disolución de la comisión" sobre las irregularidades del servicio de grúas.

Esta resolución será llevada al pleno del jueves para su aprobación, con lo que se zanja la parte administrativa del ayuntamiento.

La resolución será llevada el jueves al pleno para dar por cerrado el estudio administrativo

Y es que la propia "renuncia" de los ediles de USP y XTF-NC propició la resolución para cerrar en sesión plenaria uno de los quebraderos de cabeza del grupo de Gobierno conformado por CC y parte del PSOE (con la excepción de los rebeldes Javier Abreu y Yeray Rodríguez) y las tesis del propio PP, que ha presidido la comisión. Ahora toca resolver la vía judicial por el robo de piezas de coches.

El portavoz de USP, Rubens Ascanio, aseguró que la resolución solo trata de "salir por la tangente" y el jueves al pleno "se lleva una especie de no dictamen y un acuerdo que es el disolver la comisión", acusando al PSOE de "taparle las vergüenzas a CC con la inestimable ayuda del PP".

El presidente de la comisión, Antonio Alarcó (PP), consideró que "ha sido un trabajo leal con la ciudadanía y sin prejuicios", mientras que el edil de Seguridad, Jonathan Domínguez, dijo que "no hay dictamen y sí acuerdo de disolución", y acusó a USP, XTF-NC y Cs de "enfocar los supuestos problemas en algo de lo que no somos competentes".