La formación Sí se Puede (SsP) en el municipio de El Rosario rechazó ayer renegociar las condiciones del pacto de gobierno suscrito entre IR-Verdes y el sector más oficial del PSOE, en ese entonces representado por María de los Ángeles Rodríguez, Soledad Negrín e Iván Armas, tras la resolución de la Asamblea Insular de SSP celebrada en febrero del año pasado.
Así lo avanzó el portavoz local de SSP, Carlos Pérez, en referencia a la información adelantada en su edición de ayer por EL DÍA, sobre la intención del PSOE de negociar las condiciones de su permanencia en el Gobierno después de los cambios producidos en el seno del partido, en donde los hasta hace poco "rebeldes" Álvaro Meneses y José Estévez (cercanos al sector del exalcalde Macario Benítez) han tomado las riendas.
"No se van a renegociar las condiciones que hemos firmado", y en cualquier caso "tampoco vamos a permitir injerencias que dificulten el buen hacer de todo el gobierno municipal", dijo Pérez al respecto.
La asamblea local de SsP destacó: "El acuerdo para incorporar a un sector del PSOE al gobierno de cambio constituido por nosotros e IR-Verdes tras las elecciones de 2015 fue estudiado y aprobado en un debate de la Asamblea Insular de SSP", en el que se dejó muy claro que en el acuerdo del nuevo gobierno "no existía cabida alguna a negociaciones con la herencia de la corrupta dirección del PSOE de Macario Benítez", dijo Pérez, en clara alusión a los socialistas Estévez y Meneses.
"La renovación constatada en el consistorio en tan solo dos años y medio del gobierno se plasma día a día en la transparencia y fiscalización de todas las iniciativas municipales y en el resultado de políticas pensadas para mejorar la vida de los vecinos", explicó.
SsP reitera que "no contempla ningún cambio en este sentido ni pondrá en peligro el trabajo de los integrantes de un grupo de gobierno (Fidel Vázquez y Beatriz Díaz ) que está sacando adelante numerosos proyectos de mejora para el municipio, a pesar de soportar la losa de acuciantes problemas heredados por los años de nula gestión del macarismo en asuntos tan elementales como las infraestructuras del servicio de aguas".