Más de 100 personas pertenecientes a la empresa Posicionamientos de Aseo Urbano SA (PAU), adjudicataria del servicio de limpieza en los centros escolares y en las dependencias del Ayuntamiento de La Laguna, se concentraron ayer durante dos horas en la plaza del Adelantado con el objetivo de que el área de Contratación de la corporación, que dirige la concejal Mónica Martín, invalide el pliego de condiciones del nuevo contrato que se ha expuesto en el BOC para su seguimiento por parte de las empresas del ramo.

Lo cierto es que la concentración provocó que la responsable política bajara y departiera con una representación de los trabajadores para explicar su posicionamiento ante el aviso de huelga de UGT y las medidas de presión tomadas por la plantilla. Allí les emplazó a una reunión la próxima semana, previsiblemente, tras hablar con los técnicos del área y estudiar, debatir y desgranar los detalles del pliego denunciado.

Pero antes de producirse la reunión informal en la plaza, los empleados de PAU realizaron un paro durante dos horas (de 08:00 a 10:00 horas) en donde se manifestaron con gritos, tambores y banderolas frente al despacho de la edil. Durante una hora y media se escucharon consignas como "no te escondas, da la cara"; "Mónica, da la cara"; "si esto no se arregla, venga, venga venga" (también contra José Alberto Díaz); que dejaron bien claro el objetivo de la concentración.

En relación a las movilizaciones y el preaviso de huelga de los trabajadores de la limpieza en los colegios y las dependencias públicas, Mónica Martín aseguró ayer que "no tenía constancia de un preaviso de huelga hasta que lo vi en los medios de comunicación". Añadió "desconocer las demandas de los trabajadores porque en el preaviso de huelga no vienen establecidas. Les he manifestado, además, mi deseo de atender sus demandas y estudiarlas con el personal del ayuntamiento y en breve, posiblemente la próxima semana, sentarnos para verlas".

Por su parte, el delegado sindical de UGT, Marcos Hernández, confirmó que el lunes volverán a concentrarse en espera de la llamada y recordó, en su opinión, las irregularidades detectadas en el pliego impugnado, entre las que se encuentran "el incremento de la carga de trabajo con el mismo personal, que ya está sobrecargado, o las dudas sobre la aplicación de dos convenios distintos, así como la solicitud de que la empresa adjudicataria del nuevo servicio regale 6.000 horas de trabajo, lo que podría suponer una posible prevaricación", entre otros.