Faltaban tres minutos para las diez de la mañana, y apenas habían transcurrido cuarenta y cinco desde el inicio del sorteo, cuando el número 58.268 anunciaba la llegada del "gordo" de Navidad, el más gordo de la historia de la lotería, que ha descargado una auténtica tormenta de millones en la localidad de Grañén, en Huesca.

Hasta ese pueblo de la comarca de Los Monegros ha viajado este año el "gordo", que en apenas un instante ha convertido en millonarios a algunos de sus aproximadamente dos mil vecinos, ya que, sobre todo, el dinero ha volado a otros lugares de la provincia e, incluso, más allá.

María José, Johan, Rubén y Nayeli, cuatro de los 35 niños de San Ildefonso que han puesto voz y rostro al siempre esperado Sorteo Extraordinario de Navidad, fueron esta vez los elegidos por la fortuna para repartir tanta alegría en forma de millones, más de 700.

Pero si el "gordo" apenas esperó tres cuartos de hora para abandonar el bombo, el segundo premio, el número 53.404, premiado con 1.250.000 euros por serie, se hizo esperar. Fue el más dormilón, el más remolón, ya que no salió hasta las 12,28, cuando se habían superado tres horas de sorteo. De hecho, fue el último de los trece grandes premios en dejarse ver.

El tercero se cantó en la cuarta tabla, a las 10,43 horas, y premiará con 50.000 euros a quien tenga la suerte de poseer un décimo con el número 2.184.

El Sorteo de Navidad de este año, que coincidió con la toma de posesión del nuevo Gobierno presidido por Mariano Rajoy, ha sido el del 8, número que simboliza el poder, la autosuficiencia, el éxito material y la firmeza de planteamientos. Y es que cinco de los trece grandes premios -el gordo y cuatro de los ocho quintos- han terminado en 8.

Un cuarto, el 66.832, premiado con 20.000 euros al décimo, inauguraba a las 9,35 horas, veinte minutos después de comenzar el sorteo y en la primera de sus diez tablas, la cascada de premios de un sorteo en el que nos hemos gastado 2.681 millones de euros, un 0,49 % menos que en 2010.

Ayer, Loterías y Apuestas del Estado explicaba que en este 2011 en el que la crisis económica y los mercados no han dado respiro a los españoles, ha jugado mucha más gente que en años anteriores, aunque menos dinero.

Más de cuatro horas ha durado el sorteo que cada 22 de diciembre anuncia para muchos el comienzo de la Navidad, y que, por segundo año consecutivo, se ha celebrado en el auditorio del Palacio de Congresos de Madrid.

En esta ocasión, ante unas dos mil personas, que han querido vivir en directo la emoción de esa fábrica de sueños que es siempre la lotería de Navidad, y que ha movilizado "in situ" a más de setecientos periodistas de ciento cincuenta medios nacionales y extranjeros.

Ha sido un sorteo sin sobresaltos, en el que, de nuevo, su "maquinaria", ya doblemente centenaria, funcionó a la perfección. Lo que ha evitado, un año más, tener que recurrir a los bombos de repuesto que aguardan siempre entre bambalinas ante cualquier imprevisto no deseado.

Un sorteo en el que el soniquete de los niños y niñas de San Ildefonso, el 40 % de origen inmigrante, ha vuelto a sonar sin titubeos al cantar números y premios.

No hubo equivocaciones, y sólo en la tercera tabla una bola con "pedrea" logró escurrirse de los dedos de Camila Flores hasta alcanzar el suelo, si bien la mullida moqueta azul que cubría el escenario del Palacio de Congresos impidió que siguiera y siguiera rodando.

Camila, junto a Marisel, Rosalía e Ingrid, dieron tres quintos premios -seis mil euros al décimo-. Tres sacaron también -entre ellos el tercero- Yahaira, Araccli, Joel y Kevin, que salieron en la cuarta.

No tuvieron tanta suerte los niños que salieron en la sexta, Alicia, Karen, Belinda e Iván, que abandonaron el escenario con rostro triste, después de que no les acompañara la suerte, ya que sólo sacaron "pedreas".

La misma tristeza y desilusión mostrada por los de la novena y la décima, en las que sólo hubo "pedreas", ya que el último de los premios que quedaba por conocer, el segundo, había salido en la octava tabla del sorteo, que en esta Navidad de 2011 ha repartido más de dos mil quinientos millones de euros en premios.