El Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea de Madrid presentará esta semana el escrito de reprobación del ex consejero de Deportes y diputado regional Alberto López Viejo si no deja antes su acta de parlamentario por su presunta vinculación a la trama de corrupción investigada por el juez Baltasar Garzón. Por su parte, el presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, volvió a reclamar la destitución del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, cuya actuación en los casos de supuesta corrupción en las filas populares se cuestiona.

Mañana, en la Junta de Portavoces, los socialistas pedirán por escrito al Grupo Popular y a la Mesa de la Asamblea que López Viejo abandone su acta de parlamentario regional. En caso de recibir una respuesta negativa, esta misma semana el PSOE registrará el citado escrito, explicó la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Maru Menéndez.

La reprobación de un diputado no es de carácter vinculante, ya que la decisión de devolver el acta, que es personal, es exclusiva del parlamentario. "Somos conscientes de que él tiene la última palabra, pero no tiene la dignidad para ser parlamentario", señaló Menéndez.

De acuerdo con los plazos parlamentarios, si el escrito de reprobación se presenta esta semana no se debatiría en el Pleno de la Asamblea hasta que pasen aproximadamente un par de semanas, hacia primeros de marzo.

Para que saliera adelante en la Asamblea, donde el PP cuenta con 67 diputados, el PSOE con 42 e Izquierda Unida (IU) con 11, los socialistas necesitarían no sólo el apoyo del Grupo Parlamentario de IU, con el que suma un total de 53 diputados, sino ocho apoyos más provenientes de las filas populares, como mínimo.

En Irún, el presidente del PP, Mariano Rajoy, calificó de "acto obsceno" que el ministro de Justicia y Garzón acudieran juntos a una cacería hace una semana, y consideró que es una muestra de la "degeneración democrática" que provoca el Gobierno.

"La cacería de la que se habla tanto estos días -explicó- es un acto obsceno en sí mismo y un acto obsceno por el momento en el que se ha hecho, en plena crisis económica y en plena instrucción de un sumario contra un partido".

Rajoy confió en que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dé explicaciones de lo ocurrido el próximo miércoles en el pleno de Congreso, en respuesta a la pregunta que le va a plantear al respecto.

Para entonces, espera que Zapatero haya relevado ya a Fernández Bermejo al frente del Ministerio de Justicia, al tiempo que subrayó que el presidente de Gobierno debe explicar "si estas cosas casan con la libertad, la democracia y el Estado de Derecho".

Por otra parte, el senador y ex presidente de la Xunta gallega Manuel Fraga pidió a los militantes de su partido (PP), en el transcurso de un homenaje que recibió en la localidad lucense de Portomarín, que no anteponga las cuestiones personales a los compromisos públicos.

En clara alusión a los supuestos problemas de espionaje en la Comunidad de Madrid o a los presuntos casos de corrupción que afectan a cargos del PP, Fraga pidió que no pongan las cuestiones personales "por encima de las públicas. En este momento es esencial que volvamos al orden, pidiendo muchos votos cada uno".

La Comisión de Investigación sobre el supuesto espionaje continuará esta semana con los trámites previos a la celebración de comparecencias, entre ellos la discusión sobre la petición del PSOE e IU de recusar a su presidente, Benjamín Martín (PP).