Sólo el 45% de los españoles tiene completamente decidido votar en las elecciones al Parlamento Europeo del próximo 7 de junio, mientras que un 12% de los encuestados está seguro de que se abstendrá, según los datos del Eurobarómetro hechos públicos ayer. De confirmarse este sondeo, la participación en las elecciones europeas en España será similar a la que se registró en 2004.

En todo caso, la encuesta del Eurobarómetro, que se realizó a principios de mayo, pone de relieve que la precampaña electoral ha hecho que aumente la movilización de cara a estos comicios. En el anterior sondeo, que data de finales de enero y principios de febrero, sólo el 27% de los españoles se declaraba dispuesto a votar el 7-J, y el 18% tenía decidido abstenerse.

Pese a todo, la participación en España podría superar a la media de la UE. Según el Eurobarómetro, sólo el 43% de los europeos tiene decidido votar, mientras que un 6% adicional lo ve probable. A principios de año la cifra era del 34%. El 12% de los encuestados declara que no votará, muy por debajo del 19% que se manifestaba en este sentido en enero y febrero.

Los países en los que el Eurobarómetro pronostica una mayor participación son Irlanda (66% de los encuestados tiene decidido votar), Bélgica (64%), Malta (60%), Dinamarca (52%), Chipre (48%) y Lituania (46%). Las cifras más bajas se esperan en Eslovaquia (16%), República Checa (24%), y Rumanía, Suecia y Países Bajos (30% cada uno). Entre los grandes países de la UE, la previsión de participación oscila entre el 45% de Francia, el 42% de Alemania y el 34% de Reino Unido.

Entre los motivos que esgrimen los encuestados para abstenerse destaca la falta de información (62%), la convicción de que su voto no cambiará nada (61%), el desconocimiento sobre el papel de la Eurocámara (60%), o la creencia de que el Parlamento no trata los problemas de los electores (59%) o sus miembros no representan los intereses de los electores (55%).

El 52% de los españoles se declara interesado en las elecciones, mientras que el 47% no las sigue. Estas cifras se sitúan muy cerca de la media comunitaria (53% y 46% respectivamente).

De nuevo, los más interesados son los irlandeses y malteses (72%), seguidos de rumanos (64%), eslovenos (63%) y chipriotas (61%). En contraste, el 75% de los letones, el 63% de los checos y el 58% de los eslovenos afirman no estar nada interesados en los comicios para decidir la composición de la Eurocámara.

Los electores creen que los principales temas de la campaña deberían ser el paro (57%), el crecimiento económico (45%), la delincuencia (32%), el futuro de las pensiones (31%), la inflación y el poder adquisitivo (29%), la lucha contra el cambio climático y el terrorismo (24%).