La Audiencia Nacional prorrogó la prisión a los cinco dirigentes de Batasuna que permanecen encarcelados desde su detención en 2007 y que están pendientes de ser juzgados, junto a otros 36 miembros de este partido, en relación con la financiación de ETA a través de las "herriko tabernas".

Se trata de Joseba Permach, Joseba Álvarez, Rufino Etxeberria, Karmelo Landa y Juan Cruz, a los que la sección segunda de la Sala de lo Penal decidió mantener en prisión por el riesgo de fuga ante la proximidad del juicio -que se calcula pudiera celebrarse después del verano- y en el que se enfrentarán a penas que pueden oscilar entre diez y catorce años de cárcel por integración en ETA.

En sendos autos, la Sala sostiene que "existen indicios" de que las actividades de estos cinco procesados "estaban muy alejadas de lo que son unas meras reuniones de carácter pacífico" sino que más bien les sitúan en "una plena integración en la banda criminal, a través de su actividad en Batasuna, por un mero reparto de papeles".

Así para el tribunal -compuesto por los magistrados Fernando García, Ángel Hurtado y el ex portavoz del Poder Judicial Enrique López (ponente)-, en contra del principal argumento de las defensas para solicitar su libertad, su actividad "no se circunscribe a una mera acción política".

Los 41 procesados en esta causa, entre los que destaca Ar-naldo Otegi, se encuentran pendientes de juicio desde que el juez Garzón concluyera, el 1 abril de 2008, este sumario, el 35/02, que abrió en 2002 para investigar la sumisión de Batasuna a ETA y que derivó en la ilegalización de la formación abertzale.