El número de empresas públicas se reducirá de manera "importante" para recortar el gasto de la Administración General del Estado (AGE) y "ganar en eficiencia", anunció hoy la vicepresidenta Elena Salgado, que reconoció que podría haber fusiones entre compañías con funciones similares.
La ministra de Economía y Hacienda aseguró a los medios de comunicación, tras la primera reunión de la Comisión interministerial con los partidos políticos en la búsqueda de un pacto anticrisis, que el Gobierno presentará en marzo un plan de reestructuración y ajuste del sector público.
Dijo que "habrá una reducción importante" del número de empresas públicas en todos los ámbitos, incluyendo el del patrimonio y el de fomento, con el objetivo de "racionalizar las estructuras y el funcionamiento" de la AGE para ganar en eficacia.
Por ello, pidió que el resto de las administraciones, autonómicas y locales hagan el mismo esfuerzo que el Gobierno.
Salgado eludió dar detalles sobre el número de empresas que podrían desaparecer pero reconoció que será posible que aquellas que tengan actividades conexas puedan fusionarse en una única.
No obstante, preguntada sobre la posibilidad de la desaparición de algunos ministerios, dijo que lo importante son las políticas y el esfuerzo de austeridad y lo demás es "un gesto hacia la galería que no tiene mayor utilidad".
Además, puntualizó que la facultad de eliminar ministerios solo la tiene el presidente del Gobierno.
Este plan de racionalización de la AGE no fue tratado durante la reunión de la Comisión anticrisis, por lo que el PP se mostró sorprendido al conocerlo a través de la prensa.
El portavoz económico del grupo popular en el Congreso, Cristóbal Montoro, dijo irónicamente que la vicepresidenta lo tendría que haber dicho "ahí dentro" y que parece que ambos hablan "lenguajes distintos".
No obstante, recordó que ese plan de recorte de gasto "está en línea" con una enmienda propuesta por el PP y que supondría un ahorro de 10.000 millones en el presupuesto de gasto para 2010.
Por su parte, al portavoz de CiU en el Congreso, Antoni Duran i Lleida, no le sorprendió el anuncio ya que consideró que "implícitamente el documento lo deduce" y que el presidente del Gobierno lo dejó entrever en su último debate en el Congreso de los Diputados.
Asimismo, el dirigente de ERC, Joan Ridao, explicó que Salgado le aseguró que ya hace tiempo que el Gobierno había planteado su apuesta por "una fusión de empresas públicas, un redimensionamiento", aunque admitió que no recuerda que se hubiera lanzado esta propuesta.
El portavoz de ICV, Joan Herrera, se mostró a favor de este recorte, pero advirtió de que no debe "llevar a engaño" porque "el margen que se gana es limitado y da para muy poco".
Aseguró que su partido no aceptará privatizaciones, por lo que pidió al Ejecutivo que "no se hagan trampas".
El portavoz del PNV, Josu Erkoreka, prefirió no pronunciarse sobre este anuncio, dado que dijo que no fue un tema tratado durante la reunión, mientras que el coordinador federal de IU, Cayo Lara, tampoco señaló nada al respecto, lo mismo que las diputadas de CC, Ana Oramas, y de Nafarroa Bai, Uxue Barkos y el del BNG, Francisco Jorquera.