Tras un día de incertidumbre, se ha confirmado la identidad del tercer etarra detenido el pasado domingo en Francia. Junto a Ibon Gogeascoechea y Aguinagalde Ugartemendia, fue arrestado José Lorenzo Ayestarán Legorburu, según informaron fuentes de la lucha antiterrorista, quienes aseguran que se trata de un veterano de la banda y que se le atribuyen hasta 10 asesinatos en los más de una veintena de atentados en los que ha participado. Ayestarán Legorburu, de 52 años, vivió parte de su vida en Venezuela, país que rechazó su extradición a España. De hecho, el presidente venezolano, Hugo Chavez, quiso concederle la nacionalidad en 2006.

Ayestarán Legorburu, alias ''Basari'' y ''Fanecas'', nació en Lezo (Guipúzcoa'' y es uno de los últimos integrantes de una generación de terroristas que se beneficiaron de la Ley de Amnistía del 77 y que se marcharon a países de sudamérica tras años de intensa actividad criminal en Espña. Se trata, por tanto, de uno de los veteranos terroristas que en los últimos años habría buento a integrarse en las filas de ETA para ocupar cargos de confianza para reforzar una banda acosada por los éxitos policiales.

En concreto, Ayestarán Legorburu vivió durante años en Cumaná, una región del estado de Sucre (Venezuela) y en varias ocasiones se había solicitado su extradición sin que ésta llegara a producirse. De hecho, el propio Chavez ofreció al etarra en 2006 la nacionalidad venezolana (junto a otros tres terroristas que sumaban más de 40 asesinatos dentro de la actuvidad de la organización) con el fin de evitar que respondiese ante la Justicia española. Finalmente, la ofensiva llevada a cabo por el entonces Gobierno español hizo que el ejecutivo bolivariano rectificase su postura.

Ahora, tras ser detenido, el terrorista deberá enfrentarse a las órdenes de búsqueda y captura que contra él había dictado la Audiencia Nacional, como reslutado de diez sumarios. Así, a Ayestarán Legorburu se le atribuyen, al menos, diez asesinatos UNA INTENSA ACTIVIDAD TERRORISTA

Sus primeros crímenes se enmarcan en el año 1980, donde se le atribuye el asesinato del jefe de los Miñones de Álava, Jesús María Velasco, el 10 de enero; el asesinato del comandante del Ejército Eugenio Lázaro Valle, jefe de la Policía Municipal de Vitoria, el 13 de marzo y el asesinato de los guardias civiles José Vázquez Plata, Avelino Palma Brioa y Ángel Prado Mella en Salvatierra (Álava), el 4 de octubre.

Este terrorista continuó esa intensa actividad criminal en los años posteriores. Así, el 16 de julio de 1982 está acusado de asesinar al delegado de Tabacalera en Vizcaya, Alberto López Jaureguizar y el 22 de septiembre al brigada de Marina Emilio Fernández Arias en Erandio (Vizcaya).

Ya en 1983 se le atribuyen los asesinatos de Domingo Javier García González, propietario del bar ''Nicolás'' de Algorta (Vizcaya); del agente de Policía Nacional Francisco García San Miguel en Sopelana (Vizcaya), el 13 de julio y el asesinato del ex legionario Ángel Martínez Trelles en Bilbao, el 9 de noviembre de 1983.

LOS FAMILIARES DE URÍA Y CARRASCO "ALIVIADOS"

Esta nueva información sobre el tercer etarra detenido, coincide con las indicaciones realizadas este lunes por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien apuntaba que se trataba de un veterano de ETA.

Por otra parte, Rubalcaba habló con la hija del empresario Ignacio Uría y la mujer del ex concejal socialista Isaías Carrasco, asesinados presuntamente por el otro detenido, Aguinagalde. "Hasta que no se detiene a quien mató a tu padre, a tu marido, falta algo para empezar el duelo. Me dio la sensación de que, dentro del dolor, respiraban con alivio", explicó el titular de Interior sobre su charla. Además añadió: "es tremendo porque les recuerdas lo que pasó pero es como si empezara para ellos una nueva etapa".

En declaraciones a la Cadena Cope y la Cadena Ser, Rubalcaba advirtió de que ETA todavía tiene "capacidad de "matar y voluntad de hacerlo" pese a que viva un "momento difícil". Según recordó, a lo largo de estos "dos meses muy malos" para la banda terrorista se han efectuado 32 detenciones, intervenido casi 2.000 kilos de explosivo, inutilizado la base logística de Portugal además de impedirse la radicación de otra en Cataluña. "Han sido dos meses muy buenos desde el punto de vista policial", remarcó.

No obstante, hizo hincapié en que "las Fuerzas de Seguridad necesitan eficacia todos los días" mientras que "a ellos les basta con tenerla una vez". Preguntado si ETA está peor que nunca, lo consideró "probable", aunque prefirió ser "prudente" porque "estando mal, todavía les queda capacidad y voluntad para seguir matando".

Dicho esto, envió un mensaje a los simpatizantes de la izquierda abertzale, a quienes recordó que las reglas de la democracia obligan a elegir entre "votos o bombas". "O convencen a ETA de que deje la violencia decidida y unilateralmente o rompen con ella, pero la ambigüedad no la debemos permitir", destacó.