La profunda borrasca que afectó a España ayer (conocida técnicamente como ciclogénesis explosiva) ha dejado vientos muy fuertes en diversos puntos de la península y Canarias y los valores más altos se han registrado en la Cordillera Cantábrica, con rachas de más de doscientos kilómetros por hora.

El portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), Ángel Rivera, ha señalado que se han cumplido las predicciones, aunque "al no conocer perfectísimamente cual iba a ser el paso del centro" de la borrasca, en algunas zonas de Galicia y Asturias el viento ha sido menos fuerte de lo previsto.

Además de los más de 200 kilómetros por hora alcanzados en la Cordillera Cantábrica, especialmente en los Picos de Europa, el viento ha soplado con mucha fuerza en La Pinilla (Segovia), donde se registraron rachas de 181 kilómetros por hora, y Roncesvalles (178).

Otros valores importantes se registraron en Izaña (Tenerife), donde el viento sopló a 160 kilómetros por hora, a 153 en Daroca (Zaragoza), a 149 en San Juan de la Rambla (también en Tenerife), a 148 en Estaca de Bares (La Coruña), a 146 en Sierra de Ancares (Lugo), a 144 en Medina de Pomar (Burgos), a 142 en Cervera de Pisuerga (Palencia) y a 140 en Cabo Peñas (Asturias).

En Navarredonda de Gredos (Ávila) y Madridejos (Toledo) se alcanzaron rachas de 126 kilómetros por hora, de 120 en Segovia, de 115 en Morales del Toro (Zamora) y Salamanca, de 112 en Valencia de Don Juan (León), de 110 en Minas de Almadén (Ciudad Real) y Santander, y de 107 kms/hora en Llerena (Badajoz).

La Aemet aun está estudiando si algunos de estos valores han supuesto un récord, aunque Rivera ha reconocido que se trata de registros muy altos.

El viento deja paso a lluvia generalizada, una situación que se prolongará durante prácticamente toda la semana, ya que "un día sí, un día no" atravesarán España frentes atlánticos, según Rivera.

Estas borrascas atlánticas traerán precipitaciones, primero en la vertiente atlántica a partir de mañana por la tarde, que luego se extenderán a otros puntos de la península.

El fin de semana seguirá el tiempo inestable, acompañado de una bajada de las temperaturas.