El juez encargado de tramitar en un tribunal de Irlanda del Norte el caso de Iñaki de Juana Chaos volvió ayer a dar luz verde a la extradición a España del etarra, quien permanecerá en libertad vigilada en la provincia mientras su defensa prepara un recurso de apelación.

De Juana oyó durante la vista cómo el juez instructor, Thomas Burgess, desmontó uno por uno todos los argumentos de la defensa en contra de la extradición al expresar su confianza en el sistema judicial español.

Su abogado, Edward Fitzgerald, anunció que recurrirá la decisión del juez ante un tribunal de Belfast, para lo que dispone de un plazo de siete días, antes de que se haga efectiva la extradición, al tiempo que adelantó que sus alegatos girarán en torno al "estado de salud de su cliente".

Burgess llevaba analizando desde abril de 2009 los alegatos de la defensa de De Juana -a quien reclama la Justicia española desde noviembre de 2008- en contra de un fallo previo, de marzo de 2009, por la que se autorizaba su devolución a España. En esa sentencia, el magistrado ya consideraba que el delito de enaltecimiento del terrorismo por el que la Justicia española le quiere interrogar era susceptible de extradición, en virtud de la ley británica sobre terrorismo de 2006.

Durante la vista de ayer, Burgess abordó primero la negativa de De Juana a declarar en Madrid porque, según él, no existen evidencias que demuestren que es el autor de una carta leída en agosto de 2008.