La Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional absolvió ayer a dos acusados de un delito de enaltecimiento del terrorismo por defender la Yihad islámica y la actuación de los "muyahidines" en foros de internet, al considerar que esta "postura ideológica" no puede enmarcarse en "una línea clara de concreto apoyo a acciones terroristas".

Así consta en una sentencia de la que fue ponente el magistrado Guillermo Ruiz Polanco en la que se defiende que los calificativos de "muyahidin" o la expresión "yihad" "no son absolutamente y en todo caso incardinables en la esfera del terrorismo islámico", de forma que su defensa no merece un reproche penal.

El tribunal consideró probado que los acusados, el español Gonzalo López Royo y el marroquí Fath Allah Sadaq, que se enfrentaban a una petición fiscal de un año y medio de cárcel, defendieron la guerra santa islámica y difundieron en internet vídeos dedicados a Osama Bin Laden, otros líderes de Al Qaeda y guerrilleros musulmanes de todo el mundo.

Sin embargo, no encontró ninguna prueba de que este material fuera elaborado por ellos ni de que le dieran la "necesaria publicidad" para dotar a esta actividad de un carácter delictivo.

A juicio de los magistrados Alfonso Guevara (presidente), Guillermo Ruiz Polanco (ponente) y Clara Bayarri, también quedó demostrado que desde el año 2006 López Royo realizó varios dibujos en los que ridiculizaba los atentados del 11-S en Nueva York y que en varios foros de internet defendió la Yihad utilizando el pseudónimo "salaam 1420" y mostrando una fotografía de un individuo empuñando un hacha.

En concreto, en una ocasión fantaseó con ser un comandante de los "muyahidines" para mantener vivo a un prisionero durante 30 segundos "tragando su propia sangre", y en otra aseguró haber "bombardeado" su ciudad con pegatinas ilustradas con un fusil de asalto AK-47 que animaban a los "chicos magrebíes" a apoyar a las "tropas" con la consigna de "No hay más dios que Alá".

Allah Sadaq, por su parte, confeccionó otros vídeos en los que exaltaba a los líderes terroristas de Al Qaeda Osama Bin Laden, Al Zarqawi y Al Zawahiri y hacía apología de un atentado cometido por yihadistas en Ramada (Irak). En su domicilio, además, se encontraron dos manuales de doctrina sobre la Yihad, recortes y dossieres sobre Al Qaeda y dibujos y caricaturas relacionados con ETA, los GRAPO y otros grupos terroristas.