El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, rechazó ayer la exigencia del portavoz de Izquierda Unida (IU), Diego Valderas, de que adelante las elecciones autonómicas por haberse convertido en una "rémora" para Andalucía, a lo que respondió que "hay agenda, actividad" y que no se celebrarán comicios hasta el 4 de marzo de 2012.

"Hay agenda, hay actividad, hay leyes que desarrollar y contenciosos que resolver y proyectos de ley que tienen que ser aprobados por esta Cámara. Las elecciones autonómicas serán el 4 de marzo de 2012", ha sostenido Griñán durante la sesión de control al Ejecutivo en el pleno del Parlamento.

El presidente respondía así a la dura intervención del portavoz de IU, que le acusado de convertirse en una "rémora" para los intereses generales de la comunidad, de llevar a cabo una gestión "manirrota" y de aplicar una política económica "fracasada e insolvente".

"Su gestión está marcada por la malas noticias, por la frustración, por la rebelión del sector público, por el recorte competencial y la corrupción", dijo Diego Valderas.

El portavoz de IU, que inicialmente preguntaba a José Antonio Griñán por los intereses andaluces en la Unión Europea, derivó parte de su intervención a las irregularidades de los expedientes de regulación empleo para recriminar a la Junta andaluza el "mal uso" de los fondos públicos y su "incapacidad" para el control.