El presidente del PP, Mariano Rajoy, lamentó ayer el debate del PSOE sobre el relevo del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y ha apuntado que en el Partido Socialista "da la sensación de que el que más me critique es el que más posibilidades tiene de ser el sucesor".

En un encuentro con militantes en la Plaza de San Marcos de León, ciudad a la que acudió para inaugurar la nueva sede del PP, Rajoy denunció que el PSOE está "alejado de los problemas de la gente" porque su ocupación se centra "única y exclusivamente en sus debates internos, en su sucesión y en criticarme".

Ante esta situación, el líder conservador indicó que el PP "no quiere líos, ni discordias, ni problemas", sino un país "unido y mirando hacia el futuro".

Con ese fin, el PP sostiene que se ha marcado como prioridades la creación de empleo y la recuperación económica, dos metas que mientras el PSOE esté en el Gobierno "no serán posibles", según dijo ayer Rajoy con "absoluta y firme convicción".