La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, solicitó ayer al Gobierno que impugne la candidatura de Bildu a las elecciones, no sólo las listas y dijo basar esta petición en el informe policial del que los populares han tenido conocimiento.

En rueda de prensa tras el Comité de Dirección de los "populares", De Cospedal subrayó que el PP ha estimado, desde un principio, que el Gobierno debe hacer "lo legalmente posible" para que Bildu no esté ni en las instituciones ni en las elecciones y advirtió de que de no hacerlo será responsabilidad del Ejecutivo "la buena o mala salud del Pacto antiterrorista".

No obstante, no quiso anticipar qué pasaría si el Ejecutivo no se suma a la impugnación y si ello podría suponer la ruptura del Pacto, y se limitó a decir que "confía y espera" que el Gobierno "dé una respuesta afirmativa". En caso de no ser así, la secretaria general anunció que el PP actuará de la forma más conveniente.

Conversaciones

La dirigente popular informó de que sobre el asunto de Bildu el PP habla habitualmente con el Gobierno y, en concreto, en la mañana de ayer hubo una conversación en la que se trasladó la voluntad de los populares para que el Ejecutivo impugne la candidatura.

En otro contexto, quiso diferenciar el Pacto Antiterrorista de la crítica del PP a la actuación del Gobierno en el "caso Faisán" o en el asunto de la excarcelación del etarra Antonio Troitiño y ha señalado que el Gobierno "no se puede parapetar tras el Pacto para esconder sus propios errores".

Sobre Troitiño, De Cospedal aseguró que "no se obró con la diligencia debida" y ello favoreció su fuga, y precisó que una persona que cometió 22 asesinatos y fue puesta en libertad pendiente de una resolución, "algún tipo de vigilancia tenía que tener".

Insistió en que cuando la Fiscalía pidió que se reconsiderase la situación de Troitiño, debía haber pedido también medidas cautelares y, por ello, reiteró que para el PP no se actuó "como se tenía que actuar".

Por último, informó de que mañana se reunirá, en el Congreso, la Junta de Portavoces para que el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, explique todo lo relativo al chivatazo del bar Faisán e instó a la responsabilidad de otros partidos políticos para que se pueda conocer "de boca" del ministro cuáles fueron los acontecimiento que rodearon este acontecimiento y por qué se produjo.