El lehendakari, Patxi López, ha subrayado hoy que no se pueden "permitir cierres en falso" en el final del terrorismo y que se debe "construir una sociedad plenamente libre y plural depurando los restos de intolerancia política que aún perviven".

En su discurso de clausura del congreso internacional sobre víctimas del terrorismo celebrado en San Sebastián, López ha dicho que "a la izquierda abertzale todavía le queda recorrido democrático" por hacer, dado que aún "hay quien ejerce una violencia intolerante" y "la sola existencia" de ETA supone "un chantaje inaceptable".

La izquierda abertzale, ha precisado, debería empezar "por rechazar" las "prácticas inaceptables" y las "amenazas" que "estamos viendo estos días", tendría que seguir "por exigir la desaparición de ETA" y además habría de "trabajar con el resto de los demócratas para que esto no suceda cuanto antes".

El lehendakari ha dicho además que la convivencia futura tendrá que partir de "la integración de todos", pero no podrá construirse "sin una mínima autocrítica por parte de quienes han ejercido la violencia y de quienes la han acompañado".

Ante los expertos de distintas nacionalidades que han participado ayer y hoy en la Conferencia Internacional de Víctimas del Terrorismo, que han organizado los gobiernos español y vasco, el Consejo de Europa y la Organización de Estados Americanos (OEA), Patxi López ha recordado los muchos días "marcados en negro" en el calendario por ETA a lo largo de su historia.

Han sido "tantos" los asesinatos y atentados -más de 800, según ha dicho- los sufridos por las sociedades vasca y española que, a la hora de rememorarlos, "incluso ocurren dramáticas coincidencias", como la que del próximo domingo, ha señalado, cuando se cumplirán 2 años del asesinato de Eduardo Puello y 24 del atentado de Hipercor.

Éstas y otras acciones terroristas ayudaron, ha asegurado, "a levantar a una ciudadanía, muchas veces insensible ante tanto horror, y a proferir el necesario grito de condena a ETA que ha traído a la banda a su actual estado de debilidad".

Porque, a su juicio, si ETA está hoy "a las puertas de su final", es debido a "la firmeza de los demócratas", "la contundencia de la lucha antiterrorista", "la colaboración internacional", "la voz constante de las víctimas" y "la reacción de una sociedad que se despertó de su letargo para decirle alto y claro a los terroristas que no iba a seguir aceptando su chantaje".

Tras apuntar que confía en que la desaparición de ETA "sea más pronto que tarde", ha considerado que con su final "se debe abrir un nuevo tiempo" en la sociedad vasca, "el tiempo de la unidad social", de la tolerancia y del "respeto al pluralismo político".

El lehendakari ha reivindicado la necesidad de recuperación de la memoria y de hacer "una revisión veraz y sin circunloquios" de lo ocurrido, porque frente al olvido es preciso llevar a cabo "una denuncia permanente contra el totalitarismo político y el terrorismo".

Ha criticado en este sentido que, "durante años", se haya oído hablar de "expresiones del conflicto", de "todo tipo de violencia" o de "víctimas de los dos lados", que pretendían "abrir rendijas por las que dejar entrar la justificación de la estrategia totalitaria".

El lehendakari ha dedicado asimismo palabras de reconocimiento hacia los concejales de pueblos vascos que "nunca han querido dimitir" y que "se han enfrentado cada día a la pretensión totalitaria del terrorismo".

En el acto de clausura del congreso, ha intervenido también, entre otros, el secretario de Estado de Asuntos Exteriores e Iberoamericanos, Juan Antonio Yánez-Barnuevo.