El Tribunal de Caldas da Rainha, en el norte de Portugal, ha reanudado hoy el juicio a Andoni Zengotitabengoa, acusado de preparar en suelo luso uno de los mayores depósitos de explosivos de la organización terrorista ETA.

La segunda sesión del juicio, que concluye mañana, comenzó con el testimonio del sargento de la Guardia Nacional Republicana (GNR) que dio el alto, en febrero del año pasado, a una furgoneta en la que viajaba Zengotitabengoa con otro presunto etarra, Oier Gomez Mielgo.

Ese hecho fortuito, en un control de carretera rutinario, precipitó la huida de la pareja, que abandonó una casa alquilada en la localidad de Obidos con más de mil kilos de explosivos, muchos de ellos, según los fiscales, listos para cometer atentados en España.