El tribunal de primera instancia de Bruselas dio luz verde ayer a la extradición del presunto etarra Xabier Aguirre Ibáñez, detenido el 28 de octubre en la capital belga y sobre el que pesa una euroorden dictada por la Audiencia Nacional española.

Aguirre Ibáñez permaneció encerrado durante estos dos meses en el centro penitenciario de Forest (Bruselas), donde hace una semana agredió con un arma blanca a un guardia de la cárcel.

Si el presunto etarra no interpone ningún recurso a la extradición en las próximas horas, la Policía belga le escoltará en un máximo de dos semanas a España, donde quedará en manos de las autoridades y donde tendrá que responder por varias condenas pendientes por "kale borroka".

Aguirre también tiene pendientes en Bélgica dos causas por documentación falsa y por dar cobijo a un huido de la Justicia, al etarra Ventura Tomé Quiroga, quien fue detenido junto a él a finales de octubre siendo los primeros arrestados de ETA tras el anuncio del cese de la violencia.