Una excajera de la tienda Forever Young, donde Francisco Camps adquirió ropa supuestamente abonada por la trama Gürtel, aseguró ayer que el expresidente nunca le pagó en efectivo y que la primera vez que éste se acercó hasta su puesto fue para darle la mano y no para pagar el traje que se llevaba.

Así lo expuso la testigo María Calero durante el juicio por cohecho pasivo contra Camps y el ex secretario general del PPCV Ricardo Costa, en una jornada en la que también compareció la contable del citado establecimiento, Raquel Vázquez, que fue interrogada durante cerca de cinco horas.

La excajera relató que los empleados solían anotar las prendas adquiridas por Camps y Costa en la cuenta de pago de Álvaro Pérez "el Bigotes", porque sabían "que todos eran los mismos". Según contó, "el Bigotes", director de Orange Market, filial valenciana de la trama "Gürtel", tenía una cuenta abierta en la tienda en la que se iban apuntando sus prendas y las de otros, entre ellas las de Camps y Costa.

Al expresident lo recuerda varias veces en la tienda, aunque nunca se preocupaba por él: "Sinceramente, sabía que no iba a venir a la caja", aseguró.

El primer día que lo vio en Forever Young, el entonces president se acercó hasta la caja: "Pensaba que iba a pedirme el tique o a pagarme, pero vino simplemente a darme la mano y a decirme gracias y se fue (...). Yo no sabía quién era y me quedé cortada, tuve que preguntar a quién había saludado".

Despedida en 2008

Calero, que fue despedida en junio de 2008, es la autora del documento al que constantemente se hace referencia en este juicio, una cuenta de deuda por importe total de 30.678,90 euros que incluye los nombres de los acusados asociados a diferentes cantidades.

Lo hizo por iniciativa propia, "porque había mucho dinero pendiente y para tener las cuentas claras". Esta deuda se saldó progresivamente con transferencias bancarias realizadas por empresas de la trama, añadió.

La contable de Forever atribuyó a "un hacker" el envío de un correo electrónico desde su dirección al responsable del sistema informático de la empresa para que modificase tiques de venta a nombre de Camps y que figurase en su lugar el nombre de Álvaro Pérez.

Vázquez negó haber realizado esta petición a instancias de Eduardo Hinojosa (propietario de Forever), como preguntó la Fiscalía, y afirmó no haber mandado ese correo. "Me entró un hacker en el ordenador. Tengo un acta notarial, esos correos los ha podido manipular cualquiera", señaló esta testigo.