Los trece integrantes del Gobierno de Mariano Rajoy salieron ayer de su primer Consejo de ministros con un calendario claro de las reformas que deberán poner en marcha en las próximas semanas y meses, aunque los primeros ajustes se aprobarán ya antes de fin de año, la víspera de Nochevieja.

La vicepresidenta y ministra de la Presidencia, Soraya Saénz de Santamaría, se estrenó como portavoz del Gobierno tras el Consejo de Ministros, que aprobó los primeros nombramientos -ocho- de secretarios de Estado para comenzar a trabajar "de inmediato en las urgencias y prioridades" que fijó Rajoy en su discurso de investidura.

Soraya Sáenz de Santamaría ratificó que en el último Consejo de ministros del año, el próximo 30 de diciembre, se aprobará un real decreto de medidas urgentes para prorrogar los presupuestos hasta que el Gobierno presente unas nuevas cuentas para 2012 a finales del mes de marzo.

Y habrá también un acuerdo de no disponibilidad de gasto con los recortes necesarios en las diferentes partidas presupuestarias para comenzar a cumplir en los primeros tres meses del año el compromiso de reducción del déficit.

El próximo viernes

El decreto que se aprobará el próximo viernes incluirá la prometida revalorización de todas las pensiones, pero la vicepresidenta no aclaró si se congelarán o actualizarán los salarios de los funcionarios -decisión que queda en manos del ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro-.

Sí ratificó Sáenz de Santamaría que la tasa de reposición en la oferta de empleo público será cero, salvo en el caso de las fuerzas y cuerpos de seguridad y los servicios sociales básicos.

"El Consejo se ha puesto a trabajar desde el primero momento porque hay una prioridad: crear empleo", resumió Sáenz de Santamaría.

Aunque no hay un calendario previsto de reuniones, explicó que tanto Rajoy como la ministra de Empleo, Fátima Báñez, quieren mantener una interlocución "fluida y constante" con sindicatos y empresarios, que deberían presentar el 7 de enero un acuerdo que sirva de base para la reforma laboral que el Gobierno desea aprobar en el primer trimestre del año.

Sáenz de Santamaría subrayó la intención de Rajoy de asumir en primera persona la coordinación de la política económica de Gobierno. "No hay una vicepresidencia económica, pero hay un presidente volcado en la recuperación económica y la creación de empleo", manifestó.

Además de varios secretarios de Estado, el Consejo aprobó ayer el núcleo duro del gabinete del presidente del Gobierno, encabezado por Jorge Moragas y con Álvaro Nadal al frente de la Oficina económica.

Queda todavía por diseñar la estructura interna de cada departamento ministerial, pero la portavoz dejó claro que el encargo de Rajoy es ser "muy austeros" tanto en altos cargos como en personal eventual.

Sin distinción de género

Soraya Sáenz de Santamaría echó balones fuera cuando se le preguntó por proyectos no incluidos en su programa electoral, como la aprobación de una eventual Ley de la Corona, pero garantizó que los compromisos se cumplirán, como la reforma de la ley del aborto.

La primera rueda de prensa de Soraya Sáenz de Santamaría en la Moncloa fue extensa, más de una hora, e incluyó preguntas de todo tipo, desde las investigaciones judiciales del caso Faisán o sobre el 11-M, a la escasa presencia de mujeres en el Gobierno, solo cuatro de trece ministros.

Rajoy, dijo la portavoz, ha elegido a las personas más adecuadas para cada tarea, y "en el trabajo no hay distinción de género"; "el número no es importante, me parece más importante el objetivo", ha recalcado.

La vicepresidenta y ministra portavoz garantizó que hablará siempre desde la Moncloa como portavoz del Gobierno de todos los españoles y que, como tal, no hará "ni crítica ni oposición" a la oposición, al tiempo que confió en mantener relaciones fluidas con todos los partidos y, en especial, con el PSOE.

"Del contrapeso y la crítica pueden salir las mejores decisiones", ha afirmado.

Todos los ministros acordaron comparecer en el Congreso a petición propia para explicar sus proyectos en cuanto sea posible.