El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, explicó ayer, en una entrevista con la agencia Efe en la Moncloa, la primera que concede desde que asumió el cargo, que la subida del IRPF se produjo ante el aumento imprevisto del déficit público y fue una decisión "dura y dolorosa", pero "absolutamente imprescindible".

"Intentamos ser justos, equitativos y pedir -para dos años- un esfuerzo a aquellas personas que tenían más recursos económicos", añadió durante la entrevista centrada en cuestiones económicas.

El jefe del Ejecutivo declaró que no tiene previsto subir el IVA, rechazó la creación de un "banco malo" y anunció que dentro de un mes se aprobará un plan de reestructuración del sistema financiero para su saneamiento y transparencia, así como un nuevo proceso de fusiones en este sector.

Rajoy explicó por qué no apostó por una vicepresidencia económica: con cinco millones de parados, la economía es lo más importante, y "yo he querido dar una señal dentro y fuera de España de que hay un presidente del Gobierno que va a dar la cara y no se va a esconder y que asume la presidencia de la Comisión Delegada para Asuntos Económicos".

"Esa es la razón fundamental, y además he querido nombrar a un equipo muy económico", dijo Rajoy, quien repasó los nombres de los titulares de Economía, Hacienda, Trabajo, Industria, y un ministro de Exteriores "con un perfil absolutamente económico".

"Crear empleo"

"Quiero que este Gobierno responda al reto más importante que tiene España en estos momentos, que es crear empleo, que haya crecimiento económico y mantener el Estado del bienestar".

Sobre el Estado del bienestar se detuvo en otra de las preguntas: ¿Está en peligro? "No -respondió Rajoy-. Y le voy a dar mi opinión. Creo profundamente en el Estado del bienestar, en un sistema de pensiones con ocho millones de pensionistas. Creo en el sistema sanitario universal, público y gratuito. Creo en el sistema educativo que tenemos, creo que hay que mejorarlo".

Para mantener estas prestaciones, Rajoy dejó claro que hay que crear empleo, hacer reformas como la laboral y la energética, o como las ayudas a las pymes y a los emprendedores, y la reestructuración del sistema financiero.

A la pregunta de si va a subir el IVA, el jefe del Ejecutivo contestó con firmeza: "Si hubiéramos pensado que era preciso, no nos habría temblado la mano a la hora de hacerlo. Y luego, evidentemente, se lo explicaríamos a la gente".

Rajoy no prevé la subida del IVA porque afecta igual a todos los ciudadanos y porque supone de inmediato un aumento de los precios. "No nos parecía lo más justo ni lo más equitativo", añadió.

Sobre lo qué aporta su gobierno a los mercados que no aportara el de Zapatero, respondió: "Aportamos nuestra historia, nuestra convicción. Y aportamos a los mercados una mayoría sólida que apoyaron los españoles, y estabilidad política para recuperar la confianza. Ir hacia un modelo donde las Administraciones Públicas no gasten lo que no tienen".