La portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Gabriela Bravo, ha justificado hoy que el juez de Palma José Castro haya acordado que la declaración que el próximo día 25 prestará el duque de Palma, Iñaki Urdangarin, no sea grabada en formato audiovisual por la "dimensión mediática" del asunto.

"No todos los imputados son iguales, no todos los asuntos judiciales están sometidos a la misma presión mediática (...) y no en todas las ocasiones puede estigmatizarse tanto la imagen de una persona", ha dicho Bravo a TVE, para añadir que la medida no se adopta "por ser quien es, sino por las circunstancias que concurren en este caso, derivadas de la dimensión mediática del asunto".

La portavoz del CGPJ ha dicho también que, "desde el momento en que a esta persona se le ha citado como imputado ante el juez, está siendo tratado como cualquier otro ciudadano".

Por otra parte, Bravo ha calificado de "intolerables" las críticas que están recibiendo los magistrados del Tribunal Supremo que ayer condenaron al juez Baltasar Garzón a once años de inhabilitación por intervenir las comunicaciones que varios de los imputados en el "caso Gürtel" mantuvieron en prisión con sus abogados.

"Entiendo que la ciudadanía se manifieste y diga que no comparte la decisión del Supremo, pero no comparto, rechazo y me parece intolerable que se les llame fascistas por esta resolución", ha señalado.