El PP vencería en las autonómicas del 25 de marzo en Andalucía y se situaría al borde de la mayoría absoluta, en tanto que el PSOE ganaría en Asturias, donde el partido que actualmente dirige el Principado, el Foro de Álvarez Cascos, perdería entre 5 y 6 diputados.

Según sendas encuestas preelectorales realizadas en la segunda quincena de febrero y que ayer publicó el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), de confirmarse el pronóstico Javier Arenas (PP) podría presidir la Junta de Andalucía en su quinto intento.

Ningún partido logra en Asturias el respaldo suficiente para gobernar en solitario; el PSOE pierde un escaño aunque es la fuerza política más votada, el PP gana 1 o 2, IU suma 3 a sus 4 actuales y, por primera vez, entra UPyD con 2.

En Andalucía, el PP lograría entre 54 y 55 escaños (la mayoría absoluta son 55) frente a los 47 actuales, mientras que el PSOE de José Antonio Griñán cosecharía su peor resultado en unas andaluzas y, de este modo, perdería por primera vez la presidencia de la Junta.

Los socialistas, que han ganado siempre los comicios andaluces, perderían entre 10 y 12 escaños, ya que de los 56 actuales pasarían a entre 44 y 46, y contarían con el apoyo del 37,7% del electorado, cuatro puntos por debajo del respaldo que tendría su principal rival político, el PP.

De la derrota socialista se beneficiaría IU, que, con el 9,8% de los sufragios, lograría aumentar su representación en la cámara autonómica al pasar de sus 6 diputados actuales a los 9 o 10 que le otorga la encuesta. De ésta también se desprende la posibilidad de que la Junta estuviera dirigida por un gobierno de coalición entre PSOE e IU, pero sólo si ambas obtuvieran el mejor de los resultados que le concede el sondeo, es decir, 46 y 10 escaños, respectivamente.

Ninguna otra formación estaría representada en el Parlamento regional. UPyD recibiría el 2,6% de los sufragios y sería la cuarta fuerza política más votada, y el Partido Andalucista, con el mismo porcentaje, la quinta.

Mientras la cámara andaluza será tricolor si se produjeran finalmente esos resultados, la asturiana contaría con cinco partidos tras la entrada de UPyD, que, con el 4,4% de los votos, podría contar con dos representantes. Los socialistas liderados por Javier Fernández se harían con la victoria al lograr 14 escaños y el 28,2% de los votos, cuatro puntos por encima de su inmediato seguidor, el PP, que pasaría de sus diez parlamentarios actuales a entre 11 y 12.

Los electores asturianos castigarían al actual partido en el Gobierno y el Foro pasaría de 16 diputados a entre 10 y 11, con el 22,7% de los sufragios, en tanto que IU sería la formación más beneficiada, con un avance de 4 a 7.

Preferencia por Cascos

El 30 de enero, Álvarez-Cascos anunció el adelanto de las autonómicas después de que el Parlamento rechazara su proyecto de presupuestos para 2012, por lo que los comicios se celebrarán apenas diez meses después de la anterior cita electoral autonómica.

A pesar de los resultados del CIS, un 22,7% preferiría que Álvarez-Cascos fuera el próximo presidente, un 20,4% se decantaría por Javier Fernández, un 13,1% por la popular Mercedes Fernández, y un 10,6 por Jesús Iglesias, de IU.

En el caso andaluz, el 30,7 por ciento de los encuestados preferiría que Griñán siguiera siendo presidente de la Junta, aunque un 29,4 por ciento se decanta por Arenas.

Respecto a la valoración de líderes, el sondeo del CIS no aprueba a ninguno de los andaluces ni de los asturianos.

La mayor nota en Andalucía, 4,54, es para Griñán, mientras que el jefe de la oposición, Javier Arenas, logra un 4,23 de puntuación, y el líder de IU, Diego Valderas, un 3,83.