Los posibles casos de legionella de la Comunidad de Madrid han aumentado a 60, tres más que en la actualización de ayer, y ya son 27 confirmados por analítica de orina, dos más que el miércoles, según ha informado la Consejería de Sanidad en un comunicado.

De los 60 posibles casos de legionelosis notificados ya han sido dados de alta 42. Una de las personas afectadas falleció el pasado 7 de julio en el Hospital de Alcorcón, una mujer de 87 años, dándose la circunstancia de que presentaba múltiples patologías. Otras 17 personas permanecen ingresadas, 13 en planta y 3 en UCI --que evolucionan favorablemente-- y otras una en UCI con pronóstico grave.

Los afectados son 38 hombres y 22 mujeres con edades comprendidas entre los 35 y los 87 años. El primer caso inició sintomatología el 12 de junio y el último 7 de julio. De los 60 casos, 17 están ingresados.

De ellos, 1 en el Hospital de Móstoles, 2 en el Hospital Rey Juan Carlos, 3 en la Fundación Hospital Alcorcón, uno en el Hospital del Sureste, dos en el Hospital Universitario de Fuenlabrada, 2 en el Hospital Clínico San Carlos, 1 en el Hospital Infanta Leonor, uno en el Hospital La Paz, uno en el Hospital de Getafe, uno en el Hospital Marina Baixa de Villajoyosa, 1 en el Hospital Clínico San Juan de Alicante y uno en el Hospital La Salud de Granada.

El cuadro clínico predominante es una neumonía cuya evolución es variable en función de los factores de riesgo ya existentes en los pacientes.

Según el estudio epidemiológico que se está realizando a todos los pacientes afectados por el brote pone de manifiesto la asociación de los casos, identificando que todos ellos acudieron en diferentes fechas a un restaurante de un polígono industrial del municipio de Móstoles en días compatibles con el periodo de incubación de la enfermedad, que es de entre 8 a 10 días.

Hasta el momento no ha aparecido ningún caso en el que el paciente acudiera a dicho lugar en fecha posterior a la que se precintaron los elementos de riesgo: un sistema de refrigeración evaporativa, dos fuentes (27 de junio) y una champanera (3 de julio).

No obstante, los resultados de las primeras muestras recogidas en el restaurante, que se procesaron en el Laboratorio Regional de Salud Pública mediante el método acreditado y ajustado a la Norma ISO 11731, enero 2007 (calidad del agua, detección y recuento de Legionella) son negativos.

Teniendo en cuenta que los pacientes han acudido al establecimiento en fechas compatibles con el período de incubación de la enfermedad, coincidiendo en el mismo lugar de exposición y a la vista de la existencia de instalaciones con riesgo de proliferación de legionella en el establecimiento, se constata la posible existencia de un riesgo para la salud el funcionamiento de las instalaciones con posibilidad de proliferación y dispersión de la legionella del citado restaurante.

Por eso, y según establece el artículo 12 del Real Decreto 865/2003, de 4 de julio "la autoridad competente decidirá las actuaciones a realizar por el responsable de la instalación o persona física o jurídica en la quien delegue, si se sospecha que un edificio o instalación puede estar asociado con los casos notificados".

También recoge que "ante la presencia de casos o brotes la autoridad sanitaria competente podrá ordenar el cierre temporal de las instalaciones hasta que se corrijan los defectos observados o bien su cierre definitivo".

Ante esto, la dirección general de Ordenación e Inspección de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid comunicó al restaurante el cierre temporal de las instalaciones susceptibles de proliferación y diseminación de legionella --sistema de refrigeración evaporativa, fuentes ornamentales exteriores, fuente ornamental interior y champanera--.

Sanidad realizará 11 inspecciones. Hasta el momento, se han realizado 83 inspecciones y se han tomado 40 muestras que han sido remitidas al Laboratorio de Salud Pública. En los trabajos están participando 25 profesionales.

El protocolo de control y vigilancia de la legionelosis incluye la elaboración de la encuesta epidemiológica, para conocer la posible relación entre los pacientes afectados --como su lugar de residencia, o zonas frecuentadas-- así como la inspección de las instalaciones de riesgo para verificar sus condiciones higiénico-sanitarias, fundamentalmente torres de refrigeración o sistemas de refrigeración evaporativa, que pueden producir legionelosis en las zonas identificadas en el estudio.

La investigación está siendo coordinada por las dos Direcciones competentes de la Consejería de Sanidad, la Dirección General de Atención Primaria y la Dirección General de Ordenación e Inspección, que mantienen informado al Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

NO SE CONTAGIA DE PERSONA A PERSONA

La Legionelosis, que es una enfermedad de declaración obligatoria, suele presentarse como infección pulmonar o cuadro más limitativo que es la fiebre de pontiac. La evolución suele ser favorable, aunque en algunos casos puede cursar de forma grave y cuanta con tratamiento.

El origen de esta enfermedad se encuentra en la bacteria Legionella pneumophila, un microorganismo intracelular. No se contagia de persona a persona. Si coloniza torres de refrigeración u otros mecanismos que contengan agua a temperaturas templadas, lo que favorece la multiplicación de las bacterias; si estas bacterias se trasladan en aerosoles pueden ser inhaladas y entonces puede dar lugar al comienzo de la enfermedad.