El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, dijo ayer que los funcionarios de cualquier administración pública que cobren menos de 962 euros al mes percibirán la paga extra de Navidad.

En la sesión de control al Gobierno en el Senado, Montoro señaló que esta cantidad representa 1,5 veces el Salario Mínimo Interprofesional (641,4 euros).

Según el ministro, el número de funcionarios de la Administración General del Estado que cobrará la paga de diciembre se sitúa entre los 10.000 y los 15.000, a los que se suman los tde las administraciones local y autonómica.

Montoro también reconoció que no tiene la estimación de la cantidad de dinero que suma el colectivo de los funcionarios "mileuristas". Tras subrayar que, no obstante, era "importante comunicarlo a todos y especialmente a muchos funcionarios que creen que no van a tener derecho a la paga y sí la tienen", explicó que no habló de esta excepción en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del pasado viernes, porque lo que hizo fue "resumir".

Continúan las protestas

Cientos de empleados públicos pidieron ayer han la dimisión del Gobierno durante una concentración ante el Ministerio de Hacienda, convocados por los sindicatos CSIF, CCOO y UGT y en protesta por los recortes aprobados el viernes por el Ejecutivo. La convocatoria estuvo presidida por una pancarta en la que se leía: "Contra los recortes. Contra la reforma laboral".

Centenares de funcionarios cortaron al mediodía de ayer, durante quince minutos, el tráfico del Paseo de la Castellana de Madrid en protesta por los nuevos ajustes aprobados por el Gobierno, y advirtieron de que sus protestas no cesarán hasta que el Ejecutivo deje de "ahogar" al sector público.

Los funcionarios portaron pancartas con lemas como "Quieren arruinar el país" y camisetas con leyendas como "Yo una vez tuve derechos", y tras su protesta de quince minutos, coincidiendo con su tiempo de descanso, regresaron a sus puestos de trabajo.

Medio centenar de funcionarios se concentraron ayer a las 12:00 horas delante de una de las dependencias del Ministerio del Interior para protestar contra los últimas medidas aplicadas por el Gobierno para reducir el déficit.