El Gobierno está ultimando una propuesta de periodo de carencia para evitar desahucios entre los colectivos más vulnerables, después de que se haya producido este viernes un contacto "urgente e inmediato" entre los ministerios de Presidencia y Economía. Además, la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, y la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, se han puesto en contacto con la voluntad de acelerar "al máximo" los trabajos destinados a frenar los desahucios. Todos estos contactos se han producido el mismo día en que se ha conocido un nuevo caso de suicidio de una persona que iba a ser desahuciada.
Amaia Egaña, una mujer de 53 años y que tenía un hijo de 21, se ha arrojado por la ventana, desde un cuarto piso en Barakaldo (Vizcaya), cuando la comisión judicial iba a proceder al desahucio de su vivienda, perdiendo la vida en el acto. Amaia fue concejal de Eibar en 1983 y era hija de Ramón Egaña, histórico militante y presidente de la Agrupación Socialista de esa localidad guipuzcoana.
El Ejecutivo está ultimando así una propuesta de periodo de carencia para evitar desahucios entre los colectivos más vulnerables. Fuentes gubernamentales han explicado a Europa Press que esta propuesta será llevada el lunes a la reunión que mantendrán los expertos del Gobierno y los del PSOE dentro del equipo de trabajo creado para solucionar este problema social.
Este miércoles, la vicepresidenta del Gobierno y la ''número dos'' del PSOE mantuvieron un encuentro en el que acordaron pactar "cuanto antes" una reforma legal contra los desahucios. El objetivo es "resolver las situaciones de especial vulnerabilidad", con atención preferente a las familias con niños o mayores a su cargo.
Precisamente, este viernes, tras conocerse también el nuevo suceso, Soraya Sáenz de Santamaría y Elena Valenciano se han puesto en contacto con la voluntad de acelerar "al máximo" los trabajos destinados a frenar los desahucios, según han informado a Europa Press fuentes socialistas.
También han conversado durante la mañana la secretaria de Economía del PSOE y coordinadora de los tres expertos nombrados por los socialistas para abordar el tema, Inmaculada Rodríguez-Piñero, y el subsecretario de Economía y Competitividad, Miguel Temboury, encargado por su parte de la coordinación de los expertos elegidos por el Gobierno para estudiar la citada reforma legal.
En nombre del Gobierno, la ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, ha lamentado el suicidio de Amaia Egaña y se ha mostrado confiada en que "las soluciones" a estos sucesos van a llegar "muy pronto" gracias al acuerdo al que llegaron socialistas y populares.
"El compromiso del Gobierno es firme en buscar una solución a esta difícil situación por la que pasan muchas familias españolas y quiero decir también que valoramos muy positivamente que el principal partido de la oposición quiera llegar en este tema a un acuerdo con el Gobierno", ha ensalzado la ministra en declaraciones a los medios en Andalucía.
El vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Fernando de Rosa, ha recordado que desde el poder judicial se ha dicho que la legislación hipotecaria "no está dando una solución social a este problema" y ha insistido en que "hay que modificar la Ley Hipotecaria, que es una Ley de principios de siglo XX, y que no responde al principio constitucional de Estado social y democrático de Derecho".
Por parte de los socialistas, Elena Valenciano ha pedido este viernes al Gobierno y a los bancos través de su cuenta de Twitter detener "todos los desahucios" de vivienda única hasta que se ponga en marcha una nueva ley para el sector.
RUBALCABA ENVÍA DOS CARTAS A LA CECA Y A LA AEB
Mientras tanto, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha enviado sendas cartas a los presidentes de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), Isidro Fainé, y de la Asociación Española de Banca, Miguel Martín, insistiendo en que bancos y cajas procedan a paralizar todos los procedimientos de desahucio hipotecario en curso hasta tener una nueva regulación sobre este drama social.
En la misiva, Rubalcaba les informa de que el PSOE está impulsado una nueva regulación del sistema hipotecario con el objetivo de facilitar vías alternativas para aquellas familias que, "golpeadas por el paro u otras calamidades", no pueden hacer frente al pago de sus hipotecas y se encuentran ante el peligro de ejecución de las mismas.
Una situación, ha proseguido el líder de los socialistas, que está dando lugar a dramas humanos "muy dolorosos", como el nuevo suicidio de este viernes, que, a su juicio, están provocando "alarma" en la sociedad. "Profundamente consternado por el suicidio de Amaia (Egaña). Tenemos que conseguir que algo así no se vuelva a repetir", ha escrito además Rubacalcaba en su perfil de ''Twitter''.
En la misiva, Rubalcaba se pone a disposición de los presidentes de ambas organizaciones para profundizar sobre esta problemática, sobre la que el PSOE y el Gobierno ya están trabajando, para tratar de buscar medidas que frenen la escalada de desahucios que se están registrando en los últimos tiempos.
En la clausura de una jornada en Valencia, el secretario de Organización del PSOE, Óscar López, también ha insistido en que es "muy urgente" alcanzar un acuerdo nacional para reformar la ley y ha destacado que, mientras tanto, se debe "exigir a los bancos que no ejecuten ni un desahucio más".
Respecto a otros partidos, el coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha exigido la misma celeridad para cambiar la ley que afecta a los desahucios que la que se empleó para modificar la Constitución, y señala que, si no se hace rápido la reforma, "es que algunos pretenden tomar el pelo a la sociedad".
Por último, el portavoz de Unión Progreso y Democracia, Gorka Maneiro, ha expresado en un comunicado su "solidaridad" con la familia de la mujer que se ha suicidado y ha anunciado que volverá a presentar en el Parlamento vasco una iniciativa, que no llegó a debatirse en el anterior periodo de sesiones, para modificar la legislación actual y evitar que se produzcan desahucios de la vivienda habitual.