El Gobierno trabaja "con toda intensidad" para aprobar en las próximas semanas el proyecto de ley de las Cámaras de Comercio, con el objetivo de que la nueva norma -que reforzará su papel en la internacionalización y el arbitraje entre empresas- esté en marcha en el primer trimestre de 2013.
Así lo ha asegurado hoy el secretario de Estado de Comercio, Jaime García Legaz, durante la inauguración de la Asamblea General 2012 de las Cámaras, que se celebra cuando se cumplen 125 años de su nacimiento, con la mirada puesta en la nueva ley de Cámaras que prepara el Gobierno.
Esta ley debería garantizar la financiación de estas organizaciones -un asunto en el que el secretario de Estado no ha profundizado- que representan los intereses generales de la economía a través del apoyo de la actividad empresarial, en especial de las pymes, y cuya supervivencia está en cuestión desde que se suprimió la adscripción y la cuota obligatoria en el año 2011.
En la actualidad financieramente dependen de cuotas voluntarias y facturación de servicios.
García-Legaz ha considerado "imprescindible" la presencia de las Cámaras y ha reconocido que "difícilmente" han podido superar la supresión de la cuota cameral.
Ha explicado -en presencia del príncipe de Asturias, del presidente del Consejo Superior de Cámaras, Manuel Teruel, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y la alcaldesa de la capital, Ana Botella- que en la elaboración del proyecto de ley se ha escuchado a "todos los agentes implicados" (desde Cámaras a CCAA) para llegar a "una posición equilibrada".
Los aspectos fundamentales que ha destacado del nuevo proyecto se concretan en un "nuevo papel" para las Cámaras que aproveche su "enorme permeabilidad" en el fomento de la internacionalización de las pymes, lo que aún constituye "una de las principales debilidades" del sector, ha explicado.
En ese fomento de la labor exportadora se enmarca el cambio de nombre del Consejo Superior de Cámaras, que pasará a denominarse la Cámara de España, y cuya naturaleza de derecho público será también reforzada.
Otra de las principales funciones que se reservan a las Cámaras será la de aprovechar su "permeabilidad" y "cercanía" para el asesoramiento de nuevos emprendedores, así como para la detección de "barreras al emprendimiento".
Además, la ley prevé para las Cámaras funciones de mediación y arbitraje para la resolución de conflictos entre empresas, algo que servirá -ha dicho García Legaz- para reducir la carga de jueces y tribunales.
Por su parte, Manuel Teruel ha recordado que las Cámaras han tenido que efectuar un "gran esfuerzo de reestructuración interna" que ha hecho que sus empleados pasen de 3.500 a 1.500, un "sacrificio de ajuste" en el que sin embargo no ha cesado la actividad, y que ahora les permite afrontar "nuevos retos y desafíos".
A García Legaz le ha asegurado que están "impacientes y deseosos" de que se apruebe una nueva ley que dé soporte a sus funciones, para así poder "dejar de hablar de nosotros mismos y volver a poner el foco en los empresarios".
También el príncipe Felipe se ha referido al proceso de redefinición de estos organismos al asegurar que la situación "reclama que sigáis perfeccionando las Cámaras como auténticos instrumentos para la necesaria y urgente recuperación económica".