El PSOE ha alcanzado al PP en intención de voto, según un sondeo de Metroscopia elaborado para el barómetro de septiembre del diario El País, que lo publicó en su edición de ayer. La consulta, elaborada los días 4 y 5 se septiembre con una muestra de 700 personas y un nivel de confianza del 95,5%, arroja que el PSOE tendría el 30,5% de los votos, frente al 30,1% de los conservadores.

El País precisa que el sondeo "es el primero realizado con la corrección de una previsión de participación de voto del 62% (casi nueve puntos menos que en las anteriores generales). Es decir, no como muestra de la temperatura electoral del momento, sino calculando el resultado como si se celebraran ya las elecciones generales".

Tras el PSOE y el PP, se ubican en intención de voto IU, con un 11,6 por ciento, y UPyD, con el 9,0.

Por su parte, el periódico catalán La Vanguardia, de tendencia conservadora, publicó ayer otra encuesta que asegura que el PP ganaría las elecciones generales si se celebraran ahora, aunque perdería la mayoría absoluta al retroceder hasta 33 escaños.

Según el sondeo, elaborado en base a 1.500 encuestas, el PP obtendría el 38% de los votos y se quedaría con un mínimo de 153 escaños (frente a los 186 actuales), mientras que el PSOE (25%) perdería doce representantes y bajaría hasta los 98 diputados.

Por su parte, Izquierda Unida subiría hasta los 37 escaños (ahora tiene once), UPyD pasaría de los cinco diputados que obtuvo hace dos años a 25, CiU perdería tres escaños y se quedaría con trece y ERC subiría de tres a siete.

Según la encuesta, todos los líderes políticos suspenden y la mejor valorada es Rosa Díaz (UPyD), con una nota de 4,13 sobre diez, seguida de Cayo Lara (IU), con un 3,63; Alfredo Pérez Rubalcaba (PSOE), 3,14; Josep Antoni Duran i Lleida (CiU), 3,07; Mariano Rajoy (PP), 3,01; Alfred Bosch (ERC), 2,94; Mikel Errekondo (Amaiur), 2,78; y Aitor Esteban (PNV), 2,70.

En este panorama, Rajoy ha dado instrucciones al PP para que se movilice ya ante las elecciones europeas, aunque aún faltan más de ocho meses para estos comicios, con el fin de frenar en la medida de lo posible un voto de castigo a las siglas populares, según informaron ayer a Europa Press fuentes de la formación.

Tanto en el Ejecutivo como en el PP son conscientes del descontento que hay en la calle con algunas de las duras medidas que se han tenido que tomar en materia económica, lo que, unido al malestar que provocan escándalos de corrupción como el caso Bárcenas (ya casi caso PP), ha provocado una caída del partido en las últimas encuestas.

Sin embargo, Rajoy confía en que los signos de mejora de la economía española pueden frenar esa caída en las encuestas y quiere volcarse en los próximos meses en trasladar ese mensaje a los ciudadanos.

Con ese objetivo de salvar los muebles, el jefe del Ejecutivo ya ha dado instrucciones a la dirección del PP para que se meta de lleno ya en la campaña para las elecciones de mayo, que se convertirán en el primer examen a nivel nacional después de dos años y medio de gobierno.

Cayo Lara acusa al PP de borrar pruebas del caso

El coordinador federal de IU, Cayo Lara, insistió ayer en que el PP "ha destruido pruebas" por el borrado de los ordenadores del extesorero Luis Bárcenas, motivo por el que su formación va a ampliar la querella para pedir la imputación de los responsables de su custodia.

En declaraciones a los medios antes de participar en un acto de conmemoración del Día de Asturias organizado por IU, Lara dijo que su formación presentará la ampliación de la querella "a los que han sido secretarios generales del PP, o cuando menos a quienes tenían la responsabilidad de custodia de esos ordenadores, bien la secretaria general, María Dolores de Cospedal, o bien los vicesecretarios". "Vamos a pedir la ampliación de querella porque consideramos que el PP ha destruido pruebas".

IU también incluirá en su petición de ampliación de querella al ex secretario general del PP y actual presidente de Foro, Francisco Álvarez Cascos.

"Fue secretario general del PP y por tanto estuvo en la trama de corrupción", y además fue tesorero del partido entre 1990 y 1993, "y por tanto responsable directo de las cuentas", advirtió Cayo Lara.