El número de jueces y fiscales es "claramente insuficiente" y será difícil evitar que ello suponga en los próximos años "un deterioro en el servicio de la Justicia", ha señalado hoy en su discurso en el acto de apertura del Año Judicial el presidente del Tribunal Supremo, Gonzalo Moliner.

La importancia de la Justicia como un pilar del Estado que en nuestro país funciona bien, aunque necesite mejorar su agilidad, exige una mayor dotación de medios y ser considerada una cuestión de Estado por los partidos políticos, que deberían llegar a un consenso sobre ella y también en la próxima renovación del Consejo General del Poder Judicial.

Así se ha expresado en su discurso Moliner, quien ha recordado que en 2010 el Consejo general del Poder Judicial (CGPJ) informó de que hacían falta 450 nuevos jueces sobre la plantilla entonces existente.

Desde entonces el Gobierno no solo no ha incrementado el número de jueces más que en 50 nuevas plazas (2013), sino que además ha eliminado la figura de los jueces sustitutos y suplentes, ha explicado.

"Con todo ello, se ha producido una clara reducción de efectivos en el personal judicial que trae consigo el reto difícil de conseguir evitar un deterioro en el servicio", ha señalado Moliner, presidente también del CGPJ.

En su discurso de despedida, pues este mes acaba su mandato y el del actual CGPJ, cuyos vocales han de ser renovados por el Congreso, Moliner ha apuntado también la importancia del "reto" de mejorar la justicia en su conjunto que afrontará "el próximo" gobierno de los jueces.

"Y ello aún teniendo en cuenta que el nuevo diseño" que le ha impuesto el Gobierno al CGPJ "indudablemente ha introducido importantes limitaciones en su estructura".

Moliner ha expresado también su deseo de que el diseño y organización de la Administración de Justicia "se lleve a cabo con el mayor consenso entre las diversas fuerzas políticas", todas ellas comprometidas con una cuestión de Estado.

Este acuerdo debería también afectar a la elección de los miembros del CGPJ, "pues su legitimación mayor o menor no solo deriva del sistema de elección parlamentaria o corporativa que se elija, sino también del hecho de que esa elección se haga por consenso y no por cuotas" repartidas entre los partidos.

Moliner ha señalado también que la Justicia en España es mejor de lo que "suele afirmar": a pesar del incremento de asuntos, el número total de éstos se ha reducido en 2012 un 4,9 % respecto al año anterior.

Pero ha reconocido que debe progresar en eficiencia y agilidad, sobre todo en los juzgados, por su excesiva carga de trabajo, lo que requiere más medios materiales -modernizar la oficina judicial- y humanos -más plazas de jueces-.

Sin los medios necesarios las reformas legislativas de Gallardón, algunas de las cuales ha apoyado (como la nueva Ley de Demarcación y Planta o de las leyes procesales y del Poder Judicial) no servirán.